Este año, el undercut, o lo que es lo mismo, impecables cortes de pelo con el contorno rapado y la parte superior más larga han demostrado que hasta las niñas buenas pueden experimentar con las estéticas menos convencionales.
Pink, pan, punk, sin más ni MET. La moda se queda en la superficie de un movimiento que nació para ir en contra de las tendencias establecidas, y ahora son los propios diseñadores los que venden su estética al mundo, en un momento en que su verdadero espíritu tiene más sentido que nunca.