Gisele Bündchen abre las puertas de su casa y de su alma. La modelo mejor pagada de 2015 e imagen de Chanel nº 5 comparte sus recuerdos olfativos. ¿A qué huele la infancia o la felicidad para una top que se embolsa 44 millones de euros al año?

https://youtu.be/uLRqcQYtfyo

Las hojas forman una alfombra de colores ocres sobre la que la Bündchen camina descalza. Cubierta con una manta -no sabemos si lleva algo debajo o solo unas gotas de la fragancia de la que es imagen- recorre el jardín de su casa en la costa este de Estados Unidos. La modelo posa en su lugar de retiro para dos vídeos más íntimos y personales, otra manera de ponerle rostro al icónico perfume.

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Con las cifras astronómicas que la brasileña maneja, más de una abriríamos nuestra casa, nuestra alma y hasta nuestro armario a Chanel y al mismísimo diablo. Según ha publicado Forbes la modelo brasileña ha vuelto a ser la modelo mejor pagada del mundo. En este 2015 que todavía no ha terminado se ha embolsado 44 millones de euros, y lo ha conseguido a pesar de haberse bajado de las pasarelas.

La top brasileña corre en un fórmula 1 y le saca mucha distancia a la segunda, Cara Delevingne, que fue 8,3 millones de euros más rica en este último año. Kate Moss, que también puso rostro a Chanel nº 5, está en la lista pero ‘solo’ ha ingresado 4,1 millones de euros. Un perfume del que fue imagen otro icono de las pasarelas: Claudia Schiffer. Ahora resultan irrisorias las cantidades que se pagaban a las grandes top de los 80, ¿dónde quedan esos 9.000 euros por los que decían que Linda Evangelista empezaba a pensarse si se levantaba de la cama?

https://youtu.be/aOhbw8CIabQ

Gisele Bündchen se sienta en el sofá de su casa, toca la guitarra, medita y habla. De su infancia en el sur de Brasil rodeada de naturaleza, del aroma que impregnaba el ambiente, del olor a tierra mojada que le transmite paz… Y de otras sensaciones asociadas al perfume como la de los recuerdos que de repente irrumpen cuando hueles una fragancia que alguien especial utilizaba hace 20 años. Bündchen rememora el olor del perfume que usaba su madre y espera que sus hijos recuerden el suyo.