Corea del Sur marca tendencia en el mundo de la belleza. Las BB Creams iniciaron desde allí su invasión y ha sido tal su éxito que avanzan imparables letras y letras del abecedario. Ahora, por influencia asiática todo toma forma de almohadilla, llega la Cushionmanía. Maquillaje de fácil aplicación gracias a la esponja como Miracle Cushion de Lancôme.
Que Corea del Sur lidera las tendencias en belleza lo certifica el triunfo de su cosmética fuera de sus fronteras y el hecho de que se está convirtiendo en un auténtico laboratorio de ideas. Muchas firmas testan allí los productos más innovadores antes de internacionalizar su producción. Las mujeres y hombres surcoreanos son buenos termómetros porque les preocupa, y mucho, el cuidado de su piel.
Eso es lo que hizo Lancôme con Miracle Cushion, primero lo lanzó allí y se ha convertido en su producto más vendido en Corea. La cushionmanía llegó allí en 2008 y desde ahí se ha extendido a otros países de Asia como China, Hong Kong, Taiwán y Japón. Ahora llega con fuerza a Estados Unidos y Europa.
Son una versión mucho más práctica de las BB o CC Creams, perfeccionan la piel, aportan color y protección solar pero con la cushion (almohadilla o esponja) le suman un plus práctico, se aplican mucho más fácilmente. Ya ha caído rendido a sus encantos, hasta el género masculino.
El boom de la cosmética coreana no parece una moda pasajera, los productos que nos llegan del lejano país asiático se consolidan en occidente. Irrumpieron tímidamente y a través de tiendas online, pero ahora salen del ciberespacio y pisan tierra firme. Las marcas coreanas más importantes comienzan a llegar a las tiendas.
El secreto del éxito no es casual, los productos son muy atractivos –sus divertidos diseños los hacen irresistibles-, buenos y a precios asequibles. La piel impecable de las coreanas se convierte en un reclamo fantástico para que legiones de consumidoras quieran tener en casa su misma cosmética. Pero eso sí, sus cutis no son cosa de milagros, debes saber que la pereza es incompatible con la rutina de belleza de una coreana, que consta, como mínimo de 7 productos y hasta 10 pasos: desmaquillante, limpieza, exfoliación, mascarilla, tónico, esencia, sérum, contorno de ojos, emulsión y crema hidratante. Saben que la constancia es el único secreto de belleza.