“Esenciales para la salud, las proteínas son nutrientes básicos en nuestra dieta. Forman parte de alimentos cotidianos, como los huevos que nos proporcionan los aminoácidos necesarios para que nuestro cuerpo fabrique sus propias proteínas, y además, reducen el riesgo de padecer determinadas enfermedades” cuenta Rosina López, del Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación (CSIC) en su libro ‘Las proteínas de los alimentos’.
No se trata de una dieta a base de proteínas, sólo de conocer y comprender mejor las proteínas como nutrientes habituales y básicos de nuestra alimentación diaria.
En cocina, las moléculas de aminoácidos nos permiten preparar ricos merengues, mayonesas o flanes gracias a sus propiedades espumantes, emulsionantes y gelificantes.
En el gimnasio, producen músculo. De ahí que los culturistas se alimenten de batidos de proteínas o un desayuno con un cóctel rico en proteínas. En la dieta hiperproteica se pueden consumir proteínas de alimentos frescos o batidos. Consumiendo muchas proteínas se pierde peso enseguida, mucho más que con las dietas hipocalóricas, pero tiene sus riesgos.
La demanda de proteínas a nivel planetario empieza a ser alarmante. El aumento de la población, que previsiblemente alcanzará los 9.000 millones en 2050, obliga a buscar nuevas vías para obtener estos nutrientes de alimentos que no sean de origen animal. Tal y como explica Rosina López, algunos vegetales o incluso los insectos podrían suministrarnos las proteínas del futuro.
“Las Proteínas de los alimentos” Rosina López
A la venta en la web de la Editorial CSIC y Los Libros de la Catarata.
En la web de proteinas.org puedes encontrar un listado de alimentos ricos en proteínas.