Hace una semana se entregaban en Madrid los Prix Diálogo a la Amistad Hispano-Francesa. Los premiados, dos eminencias en la investigación contra el cáncer, la española y directora de la Fundación Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas Carlos III (CNIO) María Blasco, y el Pr. Thierry Philip, Presidente del Institut Curie. La flor y nata en la prevención, diagnóstico y tratamiento del cáncer. Un auténtico honor.
Aprovechando la fantástica oportunidad, les hemos robado algo de tiempo y hemos querido que ellos, que están a la vanguardia de la investigación, nos arrojen algo de luz sobre una enfermedad demasiado presente en nuestras vidas.
La Dra. María Blasco dirige, desde 2011, el CNIO, uno de los centros públicos más punteros en investigación del cáncer a escala mundial -y a pesar de la crisis y los recortes, añado yo-. Tiene como misión llevar a cabo investigación científica de excelencia en el campo de la biología del cáncer desde diferentes perspectivas. Además desarrolla nuevas estrategias diagnósticas y terapéuticas contra el cáncer a partir de sus descubrimientos científicos. Ocupa el puesto 14 en el ranking de instituciones internacionales biomédicas y la segunda posición entre los principales centros del cáncer del mundo. Entre los numerosos premios que ha recibido el centro están el Swiss Bridge Award for Research in Cancer, el Josef Steiner Cancer Research Award o la Medalla de Oro de EMBO.
Belleza Pura: ¿Hacia dónde avanza la investigación contra el cáncer?
María Blasco: “Hay que mejorar los 3 grandes frentes contra el cáncer: la prevención, el diagnostico temprano y el desarrollo de tratamientos más efectivos y específicos de casa paciente. Hay que avanzar en los tres frentes a la vez o no se conseguirá disminuir la incidencia de cáncer. Por ejemplo, a pesar de que ahora hay tratamientos más efectivos, y más curaciones, sigue aumentando la incidencia de cáncer. Esto es fundamentalmente porque el cáncer es una enfermedad asociada al envejecimiento de nuestra células y tejidos. Este envejecimiento depende a su vez en un 80% de hábitos de vida y factores ambientales. Por lo tanto, es muy importante hacer campañas de prevención, indicando la importancia de los hábitos de vida saludables que disminuyan el riesgo de enfermedades asociadas al envejecimiento como el cáncer. Asi mismo, la detección temprana a través de campañas de diagnóstico precoz del cáncer permitirá detectar los tumores cuando todavía son curables por cirugía”.
B.P.: ¿Cuáles son los avances más importantes en los últimos tiempos que están ya siendo aplicados al día a día de la lucha contra el cáncer, esos que marcan la diferencia en el diagnóstico y el tratamiento?
M.B: “Los tratamientos personalizados a cada paciente. Esto implica la utilización de diagnostico genético para la toma de decisiones sobre si dar o no quimioterapia, y en el caso de que haya que aplicarla, decidir cuál seria la más eficiente para el tumor de una persona concreta”.
B.P.: ¿En todos los casos el cáncer está escrito en los genes?
M.B: “El cáncer que está “escrito en los genes” es el cáncer hereditario, y estos casos son la minoría. Por ejemplo, en el caso del cáncer de mama los hereditarios solo representan del 5 al 10% de los cánceres. La mayor parte se producen por un daño en los genes que ocurre a lo largo de la vida. Este daño ocurre al azar y aumenta conforme envejecemos, pero hábitos de vida que resultan en un mayor daño en nuestros genes, como pueda ser el fumar, aceleran el envejecimiento y también aumentan la probabilidad de tener cáncer”.
B.P.: Si el cáncer está relacionado con el envejecimiento de las células, ¿por qué cada vez hay más casos en gente relativamente joven?
M.B: “El cáncer infantil es una enfermedad rara, por su baja incidencia. Sin embargo, hay canceres como el cáncer de mama que se diagnostica ahora a edades más tempranas, en parte por el diagnostico más temprano”.
B.P.: ¿Hay cánceres incurables?
M.B: “Casi cualquier cáncer es curable si se detecta a tiempo. Sin embargo, hay algunos tumores que son asintomáticos hasta que llegan a un tamaño considerable, lo que provoca que algunos cánceres para los cuales aún no se han identificado fármacos efectivos sean de difícil curación”.
B.P.: ¿Qué podemos hacer cada uno de nosotros para prevenir el cáncer?
M.B: “Aunque el cáncer es una enfermedad inherente a la vida, se sabe que hay determinados hábitos de vida que pueden aumentar el riesgo de desarrollarlo. La campañas de prevención del cáncer recomiendan no fumar, no exponerse en exceso al sol, tener una alimentación rica en verduras y frutas frescas, no consumir exceso de carnes o alimentos muy grasos, hacer ejercicio o tener una vida equilibrada tanto física como mentalmente”.
B.P.: ¿Cómo está afectando la crisis a la lucha contra ésta enfermedad?
M.B: “La crisis puede afectar a que haya menos recursos para investigar. La única manera de avanzar en nuevos tratamientos contra el cáncer es a través de la investigación”.
El Pr. Thierry Philip es Presidente del francés Institut Curie desde diciembre de 2013. Oncólogo y profesor universitario con una larga trayectoria relacionada con la investigación y lucha contra el cáncer. El Institut Curie, con sede en París, es una institución privada líder en la lucha contra el cáncer, que aúna el primer centro de investigación oncológica con un complejo hospitalario puntero especialmente en el tratamiento de cánceres de mama, tumores pediátricos y oculares. Fue fundado en 1909 sobre un modelo desarrollado por Marie Curie y cuenta con más de 3.300 investigadores, médicos y cuidadores que se centran en la atención, investigación y educación.
Belleza Pura: ¿Hacia donde avanza la investigación contra el cáncer en el Institut Curie?
Thierry Philip: “Estamos particularmente implicados en dos terrenos muy prometedores frente al cáncer: la epigenética y la inmunología. En el caso de la inmunología, disponemos de una importante unidad de investigación, la unidad “Inmunología y cáncer”, integrada por unas 100 personas organizadas en 8 equipos. La inmunología constituye uno de los avances más importantes de estos últimos años en la lucha contra el cáncer, con la puesta a punto de tratamientos revolucionarios para tipos de cáncer muy difíciles de tratar hasta ahora. Nuestros investigadores siguen explorando esta vía para definir nuevas estrategias y poner en marcha ensayos de vacunación terapéutica contra el cáncer con pacientes.
Por otra parte, el Institut Curie ha invertido rápidamente en el sector de la epigenética, una disciplina reciente en oncología. Y es que si los cánceres son el resultado de una sucesión de alteraciones genéticas, la genética no explica por sí sola la gran diversidad de cánceres que existe. Desde hace unos años, sabemos que en los mecanismos de cancerogénesis están implicadas modificaciones epigenéticas”.
B.P.: ¿Y en el centro hospitalario del Institut Curie, cuales son los últimos tratamientos que mejor están funcionando en la lucha contra la enfermedad?
T.P.: “Se consiguen excelentes resultados gracias a los nuevos tratamientos que constituyen las terapias específicas del cáncer, que atacan a una anomalía específica identificada en las células tumorales del paciente. Pero muchas veces, estas terapias deben ir asociadas a otros tratamientos más clásicos de quimioterapia y por supuesto, según los casos, en complemento de la cirugía y de la radioterapia que no cesan de mejorar.
En el Institut Curie, llevamos actualmente a cabo un ensayo clínico innovador bautizado SHIVA, que está basado en el mapa genético de los tumores y que hace abstracción de la localización tumoral. Sea cual sea el órgano del cual procede el tumor, se trata de buscar alteraciones moleculares correspondientes a terapias específicas disponibles con el fin de orientar la decisión terapéutica. Este ensayo evalúa en cada paciente la eficacia de la terapia específica correspondiente a la anomalía identificada en su tumor, y compara con lo que se hace en rutina actualmente. Este nuevo enfoque ha sido posible gracias a las recientes innovaciones tecnológicas, en particular gracias a la secuenciación masiva. Hace tres años, eran necesarios varios meses para establecer el mapa genético de un tumor, con un coste de varias decenas de miles de dólares. A día de hoy, más de 700 pacientes han sido incluidos y los resultados están previstos para 2016″.
B.P.: ¿Qué estamos haciendo mal?, ¿por qué hay tantos casos de cáncer?
T.P.: “No hay que olvidar que el aumento de tipos de cánceres se debe en gran parte al desarrollo del diagnóstico y a la mejora de los métodos de detección, ofreciendo así mejores perspectivas de curación y de esperanza de vida de la población. Las repercusiones de las modificaciones medioambientales y de los hábitos de vida sobre el aumento de incidencias de algunos cánceres están aún por evaluar. En el caso de los niños, por el contrario, no se constata un aumento del número de cánceres”.
B.P.: ¿Llegará un día en el que se puedan prevenir todos los tipos de cáncer?, ¿cómo?
T.P.: “Es algo con lo que soñamos todos. Los avances ya conseguidos dejan presagiar más logros, por lo menos igual de importantes que los ya conseguidos. Pero contamos más de 200 cánceres diferentes, de los cuales algunos siguen siendo igual de difíciles de combatir. Quedan aún muchas incógnitas, interrogaciones y nuevas vías por investigar para nuestros científicos y nuestros médicos. ¡Pero la esperanza está ahí!”
B.P.: ¿Cada uno de nosotros qué podemos hacer para prevenir el cáncer?
T.P.: “En realidad, podemos hacer cosas sencillas que disminuirían por la mitad el número de cánceres: no fumar, comer sano y practicar una actividad física con regularidad, y esto ¡desde hoy!”