Prevención y detección precoz, no nos cansaremos de repetirlo. El cáncer de piel se puede ver, y no hacen falta pruebas caras, nuestra vista y la autoexploración son los mejores aliados para detectarlo. Cogerlo a tiempo, salva la vida. Una mirada entrenada para captar cualquier anomalía en cualquier parte de nuestra piel y las claves que nos la AEDV (Academia Española de Dermatología y Venereología) para aprender a reconocerlo.
Una vez al mes, tómate 1 minuto -no te llevará mucho más tiempo- y comienza a escrutar cada centímetro de tu cuerpo.
1. Fíjate en la cara, incluyendo la nariz, los labios, la boca y las orejas, también por detrás.
2. Revisa tu cuero cabelludo utilizando un peine para separar el pelo en capas. En el caso de los hombres con calvicie, hay que revisar todo el cuero cabelludo.
3. Revisa tus manos, las palmas y el dorso, pero también entre los dedos.
4. Levanta los brazos para examinar la parte interna del brazo y la axila.
5. Después fíjate en el cuello, el pecho y la parte superior del cuerpo. Las mujeres debemos revisar la zona de las mamas y por debajo de las mismas.
6. Utiliza un espejo para examinar la nuca y la espalda.
7. Revisa los glúteos y la parte de atrás de las piernas. Termina examinando las plantas de los pies y los espacios entre todos los dedos.
Pero ¿cómo saber si tienes alguna mancha sospechosa?
El primero de los métodos de detección es seguir los criterios ABCDE:
– A: asimetría.
– B: bordes irregulares.
– C: coloración heterogénea.
– D: diámetro superior a 6 mm.
– E: evolución.
Pero con esto no basta porque se escapan las formas más agresivas de melanoma que no suelen cumplir éstos criterios, por eso hay que tener en cuenta dos sistemas de detección más.
El signo del patito feo: ese lunar o mancha que sea diferente a los otros que tienes en la piel. El que llama la atención porque es distinto debe hacerte sospechar.
Y los puntos de Glasgow, que se dividen en 3 criterios mayores y 4 menores. Por cada criterio mayor que cumpla la mancha o lunar debes sumar 2 puntos, y por cada criterio menor presente se asigna 1 punto. Se considera que una lesión es sospechosa de melanoma si suma 3 o más puntos.
– Criterios mayores:
1. Cambio de tamaño.
2. Cambio de forma.
3. Cambio de coloración.
– Criterios menores:
4. Diámetro superior o igual a 6 mm.
5. Inflamación.
6. Sangrado.
7. Cambio de sensibilidad (picor, dolor…).
Los tres sistemas son complementarios y siempre deben tenerse en cuenta cuando se hace la autoexploración mensual, que debe ir siempre acompañada de una visita anual -o siempre que se tengan sospechas- al dermatólogo. La semana del 12 al 16 de mayo en la que se realizarán revisiones gratuitas dentro de la campaña Euromelanoma 2014, puede ser un buen momento para esa consulta con el especialista, no hay excusas. Para solicitar cita y que un dermatólogo revise tu piel puedes hacerlo a través de la web de la AEDV (www.aedv.es/euromelanoma) o a través del Tel.: 91 543 45 35.