Vivimos, como nunca, una auténtica fiebre de centros de masajes de todo tipo, desde los de Shiatsu, los de arcilla o aceites esenciales hasta los masajes de seis euros en el metro. Hoy voy a contar mi experiencia con el masaje tailandés en el nuevo centro Kenika Thai Massage de Madrid, purito relax.
Para empezar, me gustó el contraste de la mega ruidosa calle Concha Espina frente al silencio absoluto del piso, sólo unos metros más arriba de la calle. En la cabina semioscura y con olor a flor de loto, me saludó una de las masajistas -todas nativas y formadas en Tailandia con las genuinas terapias y técnicas del país. A pesar de que ya conocía este obligado prólogo al masaje porque me lo hicieron en el hotel Asia Gardens, ya no me acordaba de que lo primero es un masaje de pies. Arrodillada, la masajista te sumerge los pies en agua templada con sales y alguna florecilla flotando…
Qué gustazo. Esas olvidadas y machacadas partes del cuerpo llamadas pies agradecieron sobremanera que se las mimara y reconfortara un ratito con un masaje que empieza a entonar el espíritu. Ya en la camilla y boca abajo elegí una de las veinte propuestas de tratamiento: el masaje relajante y ‘aliviante’ de tensiones musculares que, como todos, se realiza con aromaterapia, o sea, aceites esenciales 100% naturales combinados con la tradicional técnica tailandesa de la presión en ciertos puntos del cuerpo. Se centraron en piernas y dolorida espalda, víctima del ordenador.
En línea ascendente, la práctica tailandesa utiliza manos y codos para masajear, oprimir, presionar y relajar los músculos en los que se topa con contracturas y rigideces. Dijérase que también te afloja al tiempo tensiones de la mente, sobre todo si la dejas medio en blanco. Una tercera parte de la hora se detiene, afortunadamente, en cuello, nuca, trapecios, hombros y hasta cuero cabelludo. No se me sube la chica sobre la espalda ni me ‘incrusta’ las rodillas en las vértebras como en otros tipos de masaje tailandés más heavies que son terapéuticos pero te pueden dejar algo maltrecha en el mejor sentido de la palabra.
Le pongo un nueve a mi experiencia que incluyó un buen tute a las pantorrillas y un savoir faire que percibimos las que ya hemos recibido un montón de masajes de prueba. Recomiendo este break en medio del caos, de las malas posturas y de esta agitada vida. Otros tipos de masaje: Royal Thai o masaje balinés para favorecer la circulación. Aroma Sense para aliviar tensiones físicas y mentales. Thai Herbal Heat, a base de bolas de hierbas para aliviar dolores musculares. Thai Honey Facial para eliminar impurezas del rostro…
Precios: entre 45 euros, el masaje de pies o espalda de 45 minutos, hasta los 90 euros del Royal Thai de 90 minutos o paquetes de tratamientos de belleza desde 90 euros y masajes para parejas de una hora por 109 euros.
Kenika Thai Massage.
Avda de Concha Espina, 18.
Madrid.
Tel: 91 279 20 81