Piernas de cigüeña, piernas palo, ‘thigh gap’ o lo que es lo mismo, extrema delgadez hasta conseguir que los muslos no se toquen cuando las piernas están juntas. Es la nueva y peligrosa moda extendida entre las adolescentes que buscan en la pasarela y en iconos televisivos modelos a seguir. La obsesión ya ha llegado a las consultas de cirugía plástica, las jóvenes piden a los cirujanos que les extirpen la grasa de muslos y pantorrillas para conseguirlo.
Esperad un momento que me abofeteé la cara para recuperar el sentido… No está muy claro donde comienza esta obsesión, pero todo apunta, una vez más a la pasarela y al desfile más mediático, el de Victoria’s Secret. Modelos delgadísimas y fotos muchas veces manipuladas por el pincel de Photoshop, se convierten en el ejemplo a seguir por adolescentes que están forjando su identidad, con cuerpos en pleno proceso de formación y ávidas de referentes a seguir.
Los expertos avisan de que esta práctica puede ir asociada o derivar en trastornos alimentarios. Y no hablamos de enfermedades minoritarias, las cifras son escalofriantes, la anorexia es ya la tercera enfermedad crónica entre adolescentes y afecta a 800.000 jóvenes en en España.
Thigh gap significa literalmente “separación entre los muslos” y basta hacer una búsqueda en Internet para entrar en pánico y comprobar que es una moda demasiado extendida. Miles de tutoriales animan a conseguirlo a base de alcanzar una extrema delgadez. Pero lo cierto es que por muchos kilos que se pierdan, puede no lograrse. Endocrinos y nutricionistas aseguran que esa separación entre las piernas no depende de la delgadez, es una cuestión de constitución y morfología del cuerpo.
Las consultas de cirugía plástica y estética también está recibiendo un aluvión de peticiones, según una estadística publicada en el diario británico Daily Mail, las clínicas estéticas en Europa han registrado incrementos de hasta un 240 por ciento en la demanda de tratamientos para eliminar la grasa entre las piernas. Pero como me cuenta el doctor en estética Moisés Martín Anaya (Clínica Martín Anaya. Avda. Menéndez Pelayo, 9. Tel.: 91 435 67 76) “hay que orientar a las pacientes porque en ocasiones acuden a la consulta mal informadas, de fuentes de dudosa credibilidad y cuesta trabajo convencerlas de que lo que te piden no sólo no está aconsejado, sino que no hay que hacerlo nunca. Nuestra especialidad nunca debe regirse por modas. Sólo busca el equilibrio y la belleza del cuerpo”.
Una moda que está muy bien si haces nidos en lo alto de los campanarios con todo lo que encuentras, te dedicas a volar por los cielos de España y quieres esconder tu cabeza entre las piernas. ¿Es tu caso? Supongo que mientras no podamos metamorfosearnos en cigüeña, no. Así que abramos bien los ojos y estemos muy pendientes de las jóvenes de nuestro entorno para detectar señales de alarma.