El olfato es, sin ninguna duda, el sentido más evocador, sólo es necesario que un determinado aroma roce tu nariz, para que tu mente se transporte rápidamente a un recuerdo, un lugar o un sentimiento. El aroma de Álvarez Gómez es un ejemplo, una fragancia mítica que ha sabido sobrevivir al paso del tiempo y que este 2012 cumple un siglo convertida en un clásico.
Para hablar de la historia de esta firma hay que remontarse más de 100 años. Fue en 1899 cuando la familia Álvarez Gómez, procedente de León, emigra a Madrid y monta, en el centro de la capital, una tienda donde vendían los pocos productos de perfumería, tratamiento y maquillaje, que existían en esa época. Como la cosmética era realmente escasa, comenzaron a preparar, ellos mismos, muchos productos en la trastienda del establecimiento, con una fabricación muy artesanal, pero con una esmerada selección de las materias primas basada en los conocimientos que tenían sobre el mundo de las esencias y componentes químicos. Así, empiezan a elaborar preparados cosméticos, elixires y productos de perfumería bajo su propia marca.
De aquella fabricación artesanal surgieron muchos productos como cremas de belleza, tónicos para el cabello, elixires antisépticos y una gran cantidad de perfumes y aguas de colonia elaborados mediante la destilación de esencias y flores naturales. Pero de todas sus creaciones, hubo una que se convertiría en seña de identidad de la marca y que se creó en 1912: el Agua de Colonia Concentrada Álvarez Gómez. Nació como una preparación especial, elaborada a partir de esencias naturales de plantas y flores mediterráneas, una fragancia fresca y unisex, que pronto se convirtió en el producto que más gustaba a los consumidores y en el más vendido. Quizá en el hecho de que estuviera pensada para toda la familia, ha estado el secreto de su éxito.
El Agua de Colonia Concentrada Álvarez Gómez es una combinación de esencias naturales de origen mediterráneo: limón español, lavanda de la Provenza, geranio español, eucalipto y otros aceites esenciales de romero, tomillo, espliego y bergamota. Unos ingredientes combinados por sus propiedades purificantes, calmantes, tonificantes o estimulantes. Todavía hoy, se mantiene la fórmula original, pero ya no se hace de manera artesanal y se fabrica en unas instalaciones modernas con la última tecnología.
Desde entonces se han ido incorporando nuevos productos a la línea de aroma tan reconocible: gel de baño para piel y cabello, emulsión hidratante para cara y cuerpo, desodorante dermonatural y sin alcohol, jabón a la colonia, crema de manos y toallitas refrescantes perfumadas. También se han creado otras líneas: Balneario Aguavital, Balneario Aguacalma, una línea infantil o las fragancias Flores de Álvarez Gómez. La semana que viene, en el acto de celebración del centenario, nos espera una ‘gran novedad’, de la que no nos han adelantado nada.
La cosmética de Álvarez Gómez se distribuye en toda España a través de grandes perfumerías y también en las cinco tiendas propias que la firma tiene y en su tienda online. Al frente de la firma está ya la cuarta generación de aquellos emprendedores que llegaron a finales del siglo XIX a Madrid.
¿Cuál es el recuerdo que te evoca esta fragancia?
Precio Agua de Colonia Concentrada Álvarez Gómez: 38 euros/750 ml. – 23 euros/400 ml. – 13 euros/220 ml.
Frank García González dice:
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Lola Gavarrón 
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