¿Hay algo más gen Z que maquillarse como una Bratz?
Tras el maquillaje de Barbie, la Sirenita o Polly Pocket, llega Bratz™ x Krash, la última colección de Krash Kosmetics. Una mirada nostálgica sobre un pasado nutrido de heroínas de muy diverso calado con un denominador común: la fantasía.
No hace falta sacarse narrativas de la manga (‘inventar el agua caliente’, que diría mi madre) cuando se ha crecido arropado de creatividad. Los impulsores de tendencias de los doble cero refrescan los referentes de estilo tirando de un archivo que se recuerda glorioso.
Dios salve a Bratz
Hoy, son las denostadas Bratz -recordemos que las Monster High arrebataron el podio a estas muñecas sin mucho miramiento- quienes vuelven por sus fueros. Y, aunque también se pueda pensar que su histriónico estilo era, al maquillaje, lo que Dubai al urbanismo, es evidente que la generación que está acostumbrada a verse a través de filtros celebra poder recrear todo ese glam a base de sombras de ojos.
“Porque todxs los que jugábamos con Bratz™ ahora llevamos Krash”, como bien dice el comunicado de prensa. ‘Aiconic’, que se dice.
Quienes adoren el artificio, el glam, el glitter y la estética drag queen, sentirán arrebato por esta colección que permite trasladar el universo Bratz al maquillaje. Sombras de ojos metalizadas o con acabado glitter, iluminadores, labiales gloss, pestañas postizas… No falta un solo detalle para efectuar la performance y dejarse llevar por la fantasía, siempre con la calidad, duración y colorido habitual de los productos de Álvaro Kruse, el joven creador de Krash.
Los precios están entre los 13 euros aproximadamente para el eyeliner o los casi 30 de la paleta de sombras de ojos, lo que los posiciona en una gama media, de la que hemos de esperar una calidad más que razonable. La firma promete alta duración y resistencia a prueba de agua (y llanto), así que no lo dudes. Si quieres un toque de fantasía (o sumergirte de lleno en ella), estos son tus productos.