Es una clase de Anti-Gravity Yoga, y aunque el vídeo es en inglés, puedes hacerte una buena idea de cómo se practica esta nueva disciplina en la que te sentirás como un pájaro y que mejora la fuerza, corrige la postura y reduce el estrés.
El Anti-Gravity Yoga, o mejor dicho, que para eso tenemos un maravilloso idioma, el Yoga Antigravedad, fusiona varias disciplinas como el yoga, la danza, la gimnasia acrobática o el pilates para conseguir trabajar la musculatura de forma global. Para practicarlo se necesita una hamaca elástica, colgada del techo en dos puntos y ningún miedo a suspenderte en el aire y convertirte en trapecista de circo. ¿Te atreves?
Christopher Harrison, su creador, descubrió que suspenderse en el aire sobre la hamaca aligera la presión sobre las articulaciones y las descomprime, una vez termina la clase, aseguran que la sensación es como si el cuerpo pesara menos.
Permite realizar una gran cantidad de movimientos corporales en suspensión, aunque las mejores posiciones son las invertidas, ya que mejoran la circulación sanguínea a la cabeza. Cada sesión consta de tres partes, primero se realiza el calentamiento, después, en la parte más importante de la clase, se realizan las diferentes posturas, y por último se hace una relajación.
En España es una disciplina poco extendida, pero sin duda irá ganando adeptos porque es una forma divertida y diferente de mantenerte en forma.
En Madrid, puedes practicarlo en Madrid Espacio Creativo, en Barcelona también imparten clases de Anti-Gravity Yoga en el centro YOGA ONE del Gimnasio DIR. Busca si hay algún centro en tu ciudad dónde se practique y ¡a volar!
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