Los desodorantes naturales sin tóxicos, no solo son más ecológicos y saludables para ti y el medio ambiente, también pueden prevenir algunas enfermedades. Tal y como han determinado diferentes estudios científicos, tras 20 años de uso humano… ¡Más vale tarde!
Sí, somos conejillos de Indias y la ley actúa en base a las evidencias científicas. Sin embargo, hasta que llegan las prohibiciones por ley, quedan marcas de cosmética que continúan incluyendo sales de aluminio, alcohol, parabenos, pfalatos y otros disruptores endocrinos. Menos mal que existen otras firmas que fabrican desodorantes naturales sin tóxicos, pensando en nuestra salud, aunque tengan menos beneficios cosméticos.
Si tan dan a elegir, la mejor opción son los desodorantes con fórmulas naturales, sin ingredientes químicos tóxicos; tildados de peligrosos por médicos especialistas en salud y medio ambiente como el epidemiológo Dr. Nicolás Olea. Entre otras cosas, porque favorecen las alergias cosméticas, la predisposición al cáncer de mama y alteran nuestro sistema inmunológico, tan vigilado en estos tiempos de pandemia.
Consejos para elegir desodorantes naturales y saludables sin sustancias cancerígenas ni disruptores endocrinos
Los desodorantes líquidos, en spray, suelen llevar alcohol entre sus componentes, El alcohol reseca la piel y no está recomendado en pieles sensibles porque puede irritar en exceso. En su lugar resultan mejor opción los desodorantes sólidos, en crema, en formato roll-on o en barra de mineral de alumbre.
Preferir siempre desodorantes ecológicos elaborados con extractos vegetales, aceites esenciales, alcoholes y fragancias naturales que no taponan los poros y permiten una transpiración natural.
Ojo con los perfumes de algunos desodorantes, pueden desencadenar el síndrome de sensibilidad química múltiple, aunque se asocia más con el uso de determinados insecticidas, ambientadores y barnices. Pero mucha veces es la suma de toda la química que llevan los productos de los que estamos rodeados.
La zona de las axilas es particularmente delicada por encontrarse cerca del pecho y los ganglios linfáticos. Ya existen evidencias científicas respecto al uso de desodorantes y antitranspirantes con aluminio por tener efectos hormonales peligrosos que pueden derivar en cáncer de mama. Según un estudio publicado en el International Journal of Cancer, el aluminio genera tumores cancerígenos en cultivos de células epiteliales mamarias.
¿Por qué son nocivos los disruptores endocrinos?
“Los disruptores endocrinos hackean el mensaje hormonal y producen efectos como déficit neuroconductual, problemas de aprendizaje, relacionados con la incidencia de síndromes como asperger y autismo. Otros efectos son la endometriosis y la mala calidad seminal, que se traduce en aumento de la infertilidad. De hecho, cada vez hay más clínicas de reproducción asistida en todas nuestras ciudades. También producen disrupción metabólica, que conlleva obesidad, hipertensión y diabetes tipo 2, y que pueden generar muchos problemas de salud y un gasto sanitario enorme para el país.” explicó Nicolás Olea, catedrático de medicina y autor del libro “Libérate de tóxicos” (RBA Editores) .
Los desodorantes veganos pueden llevar químicos tóxicos
Otra advertencia y duda generalizada por lo confuso del término es estar confiado con el uso de cualquier desodorante vegano pensando que solo contiene extractos vegetales. Pero no siempre es así, legalmente lo único que no lleva son ingredientes animales, y puede contener solo un 1% de extractos de plantas de origen vegetal . Sin embargo, pueden llevar en su fórmula agentes químicos tóxicos que afecten a nuestra salud. No todos los desodorantes que parecen naturales están libres de tóxicos en su composición. Y el que este libre, que tire la primera piedra (de alumbre) el desodorante mineral más famoso del mundo.
Ingredientes tóxicos detectados en los desodorantes: aluminio, ftalatos, parabenos, siliconas, triclosan, formaldehido…
Clorhidrato de Aluminio. Lo primero es comprobar que no contiene sales de aluminio bajo el nombre de “Aluminium Chloride” y “Aluminium Hydrochloride”. Sin duda, el aluminio es el ingrediente más tóxico y varios autores lo relacionan con el cáncer de mama, la endometriosis y el Alzheimer.
Siliconas: Las dimeticonas son las siliconas más utilizadas en cosmética. Derivadas del petróleo se encuentran bajo muchas denominaciones. Además de actuar como disruptores endocrinos, resultan muy contaminantes. Algunas han visto reducido su uso al 0,1% por el gran impacto ambiental que tienen y muchas ya se han probido completamente (D4 y D5).
Parabenos: Son disruptores endocrinos, es decir, químicos que mimetizan nuestras propias hormonas y alteran nuestra salud. Replican el papel de nuestros estrógenos y están relacionados con algunos tumores de cáncer de mama.
Triclosan: Suele aparecer en el listado de ingredientes de muchos desodorantes por su efecto bactericida contra el sudor. También es un disruptor endocrino que a menudo aparece en los productos “libres de parabenos”.
Ftalatos/Parfum: están catalogados como disruptores endocrinos. Bajo las siglas DBP (dibutyl ftalato) o DEP (diethyl ftalato), y también como ” parfum “. Su principal función en la fórmula es que el perfume permanezca más tiempo sobre la piel. Si pensabas que Axe era un desodorante estás equivocad@es un perfume corporal que camufla el olor del sudor.
Pero hay más ingredientes nocivos en los desodorantes: Lauril sulfato de sodio, Yodopropinil butilcarbamato, Formaldehido, BHT, Butylphenyl Methylpropional Hydroxyisohexyl 3-cyclohexene carboxaldehyde (HICC); una fragancia involucrada en muchos casos de alergia y que se prohibió en 2021.
Gracias a la vigilancia cosmética y las medidas de seguridad impuestas por la CEE, los desodorantes mejoran cada día sus fórmulas para que sean más saludables y seguros.