La zanahoria es rica en betacaroteno, antioxidantes y vitaminas A, E y C. Te contamos por qué es buena idea anegarte en sus virtudes, tanto por dentro como por fuera.
La zanahoria se incluye en multitud de ‘recetas’ de belleza. Todo un regalo vegetal para la piel.
El mes de abril y su esperadísima Semana Santa activan la ‘alerta solar’. Si no eres de las que usan protección solar todo el año (que deberías), ha llegado el momento de pensar en ello. Además de las cremas tradicionales con SPF, que son el actor principal de cualquier estrategia de protección de la piel, échale un vistazo a las que contienen zanahoria. Esta humilde hortaliza insufla a la piel energía e hidratación gracias a su altísimo contenido en betacarotenos, antioxidantes de primera línea que refuerzan las defensas de la piel y estimulan la melanina para facilitar la conquista (y mantención) del bronceado.
Además, la zanahoria aporta luminosidad a la piel y tiene propiedades emolientes, lo que quiere decir que consigue humectar la piel seca. ¡Ojo! La misma lógica se aplica a la ingesta de zanahoria. Los expertos en nutrición recomiendan comer de 1 a 3 diarias para combatir desde dentro los signos de envejecimiento y proteger la piel de las agresiones de la radiación UV.
Siguiendo con el aporte nutricional, pasamos a la nutricosmética solar, una de las ideas que más impactan sobre el bronceado. Las cápsulas diseñadas para tomar el sol bloquean o enlentecen la quemadura solar, te ayudan a conseguir un bronceado más bonito y también lo alargan. No sustituyen la crema con SPF en ningún caso, pero sí resultan un apoyo muy notable.
Estas de Arkopharma cuentan con el estricto Towanda seal of approval. Su fórmula contiene vitamina A, E, pimienta negra, cobre, selenio, aceites de semilla de borraja, sésamo y argán, licopeno, luteína y betacarotenos. Hay que comer mucha zanahoria natural (entre otros alimentos frescos) para alcanzar ese aporte vitamínico.
Precio: 27,90 euros.
Y, si eres más amante de las zanahorias que el mismísimo Bugs Bunny, ¿qué me dices de usar un perfume de zanahorias?
I love les Carottes, de la poética perfumista Olivia Giacobetti para su propia marca Honoré des Prés, captura la esencia vegetal, fresca y terrosa de la zanahoria desde la raíz al bulbo. Una delicia refrescante y cremosa que, además, se presenta en un envase estilo vaso de Starbucks con huevera ad hoc que es un hallazgo del diseño.
Precio: 76 euros / 50ml.