La actriz, abanderada de la belleza real, se convirtió hace unos meses en la embajadora internacional de L’Oréal Paris y ahora es la protagonista de “Lecciones de Valor”, la serie de testimonios protagonizados por las portavoces de la marca que celebran el empoderamiento de las mujeres.
Kate Winslet hace un llamamiento a las mujeres a que no seamos duras con nosotras mismas y a no permitir que nos juzguen.
Hace ya 25 años que saltó al estrellato por su inolvidable papel junto a Leonardo DiCaprio en Titanic. Desde entonces, ha demostrado ser una actriz brillante y también una mujer reivindicativa consciente de que su ejemplo puede marcar el camino de muchas mujeres.
Y su ejemplo no es otro que el de una mujer normal que ha demostrado que, sin entrar en los estándares que parece que el cine y la televisión –y otros tantos ámbitos- imponen a las mujeres, se puede triunfar como actriz.
Para conseguirlo, eso sí, hay que empeñarse mucho y luchar contra los estereotipos. Como ella misma contó la entrega de los premios BAFTA en 2016: “Cuando era joven, cuando tenía solo 14 años, un profesor de teatro me dijo que a lo mejor me iría bien si era feliz conformándome solo con papeles de chica gorda… ¡Mírame ahora!”.
Kate WInslet, icono de la belleza real.
46 años y un gran trabajo psicológico para aprender a quererse y aceptarse con sus defectos y sus virtudes, la han convertido en lo que hoy es. Una mujer que reivindica sus curvas y una actriz consagrada capaz de plantarse y prohibir que la retoquen digitalmente.
Ha llegado a un momento de su vida en el que tiene la seguridad suficiente para decirle a Craig Zobel, director de la miniserie Mare of Easttown “ni te atrevas” cuando éste le sugirió retocar digitalmente su cuerpo. Querían eliminar sus michelines en una escena de cama en la que aparece desnuda. Pero antes ya se había enfrentado a los publicistas que usaron Photoshop para modificar el cartel promocional de la serie. Les dijo: “Chicos sé cuántas arrugas tienen mis ojos, por favor, ponedlas de nuevo”.
Pero el camino no ha sido fácil. Desde su papel en Titanic ha tenido que aguantar como han cuestionado su cuerpo una y otra vez. Según ella ha contado, llegó a sentir vergüenza, a estar 12 años sin subirse a una báscula y a plantearse abandonar el cine. Llegó a tener fama de desagradable con la prensa cuando en realidad, según ha confesado, la llamaban para preguntarle por su físico y ella simplemente se defendía.
Kate Winslet para L’Oréal Paris, porque ella lo vale.
Febrero es el mes internacional de la autoestima y el momento elegido por L’Oréal Paris para desvelar un nuevo capítulo de la serie de vídeos que celebran el empoderamiento de las mujeres.
Al natural y desmaquillada, nos anima a las mujeres a apoyarnos las unas a las otras, a celebrar la diversidad, a no ser tan duras con nosotras mismas y con las demás y a sentirnos bien en nuestra piel. “Porque yo lo valgo” como un mensaje de reafirmación que para ella significa “poder ser la dueña de mi pasado y sentirme orgullosa de él, al igual que de mi presente y de mi futuro sin olvidar este cuerpo, esta cara, ni de las marcas y cicatrices que forman parte del camino”.
Un camino que le ha llevado a Kate Winslet y a tener muy claro el consejo de autoestima que daría a las mujeres más jóvenes: “Cuida tus pensamientos, no seas dura contigo misma. No busques ideales imposibles. No permitas que las redes sociales te absorban en ideales que engañan. No todo el mundo tiene vidas perfectas, no todo el mundo es feliz. No te midas frente a otros.
Sé honesta contigo misma. Incluso en esos días en los que quieres más de lo que tienes o quieras cambiar algo, permítete tiempo para ti misma y para saber que no tienes por qué tener todas las respuestas inmediatamente. Mañana es un nuevo día y puede ser un nuevo comienzo. Disfruta de la vida, come bien, descansa. Haz algo que te haga sentir viva. Sal a disfrutar del campo, date una ducha fría, enciende una vela, lee un libro de recetas. Las cosas más simples pueden ser placenteras”.