Superalimentos que deberías incluir ya en tu dieta habitual si es que aún no lo has hecho. Llena de colores tu plato, saborea a conciencia y prepara tu mente y tu cuerpo para la llegada del caloret con tus reservas nutritivas a tope.
Parafraseemos a Jardiel Poncela, que siempre da gustirrinín. ¿Existieron alguna vez los 11.000 superalimentos? ¿Uno siquiera? Incluye en tu dieta al menos 5 Superalimentos muy básicos y que sean los héroes de tu nevera.
Esta etiqueta ‘comercial’, ‘editorial’, o como la quieras llamar, alude a los alimentos cuyo alto valor nutricional (son ricos en antioxidantes, vitaminas, minerales y demás microsustancias poderosas) los convierte en auténticos objetos de deseo para endocrinos, ortoréxicos, amantes del fitness, de la vida saludable, del amor y de Instagram, padres y madres con acceso a Internet, e incluso foodies.
Comer bien no es cuestionable, y por muchos ‘peros’ que podamos poner a la etiqueta, supongo que todos coincidimos en que siempre será mejor comer ‘sano de toda la vida’ que guarrerías procesadas envueltas en plástico de colorines.
‘Sano de toda la vida’ es el aceite de oliva virgen extra, considerado también un superalimento que hace de la dieta meditérranea la más envidiada de los nutricionistas de medio mundo. Las legumbres, algunas especias como la cúrcuma o el jengibre, el chocolate negro o los frutos secos son también superalimentos a incluir en cualquier dieta sea del tipo que sea. El aguacate, el brócoli (las verduras crucíferas en general), el mango, las setas…el listado es enorme y hay donde elegir.
No hay que complicarse demasiado, ni tampoco encarecer la bolsa de la compra para beneficiarse de las propiedades de los superalimentos. Esta primavera, reivindica su poder curativo y refuerza tu sistema inmunitario sin más extras que lo que pongas en tu tenedor.
Aceite de oliva virgen extra.
Nuestro oro líquido. España tiene el placer de ser uno de los mayores productores de aceite del mundo. Disminuye el colesterol ‘malo’, engrasa el sistema cardiovascular para que funcione como debe y, en mujeres, ha demostrado su eficacia para controlar el desarrollo del cáncer de mama. Además, es muy rico en vitamina E, uno de los mayores antioxidantes conocidos.
Hojas verdes, el superalimento más fresco.
Espinacas, rúcula, acelgas… Las hojas verdes son ricas en clorofila, sustancia de efecto detox que ‘purifica’ el organismo. Además, son ricas en aminoácidos, ácidos grasos omega y fibra, lo que ayuda a limpiar el sistema digestivo.
Sardinas, pescado azul para proteger tu corazón.
Ricas en ácidos omega 3, mejoran la salud cardiovascular y reducen la inflamación. Si prefieres otro pescado azul, puedes comer atún, trucha, anchoas, caballa, lamprea, pez espada… Cuanto más pequeño el pez, menos metales pesados acumulará en su carne.
Kiwis, una fruta con súper vitaminas.
Una de las frutas más ricas en vitamina C. Consumido a diario, ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer. Es rico en potasio, magnesio y fibra.
Chocolate negro, un superalimento súper rico.
Ojo: lo bueno del chocolate es el cacao. Es por ello que ‘no vale’ comer chocolate blanco, sino que tiene que contener un porcentaje de cacao superior al 70% para ser considerado de la tribu de los superalimentos.
El cacao es rico en antioxidantes, magnesio, calcio, cobre, manganeso… Cuida el corazón, mejora el aspecto de la piel y levanta el ánimo si te sientes decaída esta primavera.