Malas noticias: comer dulce provoca acné. Si todos los días tomas alimentos azucarados, habrá más riesgo de que aparezcan granos.
Sentimos ser portadoras de malas noticias. Pero comer dulce provoca acné. El chocolate se salva según dicen algunos estudios, aunque hay estudios para todos los tipos sobre todo si es sin azúcar. Supongamos una persona que toma alimentos azucarados (digamos, pasteles) a diario. Pues bien. Tendrá 2,7 veces más riesgo de tener espinillas, según los expertos en dermatología de los laboratorios Pierre Fabre.
Comer dulce provoca acné: Es cuestión de hormonas
La clave de esta situación está en el índice glucémico de determinados alimentos. Es decir, su capacidad de aumentar la tasa de glucosa en sangre. Esto favorece la producción de los andrógenos, que son las hormonas implicadas en el desarrollo del acné.
Pero no solo importa que tomemos dulces, sin más. Hay que prestar atención a las cantidades. Es decir, que por tomar un poco de chocolate no te va a pasar nada. Pero no es plan de que te tomes la tableta entera.
¿Y la comida basura?
En realidad, por internet (y por la vida) circulan muchas fake news en torno a dieta y acné. Por ejemplo, y pese a lo que suele creerse, ningún estudio ha demostrado la relación entre los productos lácteos y la aparición de granos.
Sobre la comida basura, la cosa no está tan clara. Un estudio del 2010, realizado en Corea con 1285 pacientes de ambos sexos (783 con acné), constató un empeoramiento del acné en el 54%, relacionado con dietas de alto índice glucémico. Es decir, ricas en grasas altamente saturadas y yodo. Por ejemplo: hamburguesas, donuts, fideos instantáneos, bebidas carbonatadas, pollo frito… Pero de nuevo, todo es cuestión de moderación. Si un día surge el plan de comer una hamburguesa, no hace falta que seas tú el que se pida la ensalada.
¿Dieta anti-granos? Mejor consejos saludables
No se puede afirmar de modo rotundo que haya una dieta antiacné. Será un notición el día que la haya. Porque no olvidemos que esta enfermedad afecta a entre un 79% y un 95% de la población adolescente; a un 40-54% de los mayores de 25; a un 12% de las mujeres maduras y a un 3% de los hombres en esa edad.
A los científicos les cuesta establecer relaciones claras entre determinados alimentos y la aparición de granos por su investa. Sin embargo, sí está clara la existencia de alimentos con efectos saludable sobre el organismo. Y esto repercute sobre la salud de la piel.
Puedes tomar comidas ricas en zinc (lentejas, champiñón, carne de buey, ternera, huevos), siempre sin abusar. También alimentos ricos en antioxidantes, que previenen el envejecimiento prematuro de la piel. Por ejemplo, ciruelas, uvas rojas, fresas, naranjas, kiwi, espinacas, brócoli, alcachofas, judías pintas o zanahorias crudas. Por último, los alimentos ricos en Omega 3 son de ayuda frente a la inflamación. Lo encontrarás en pescados como el atún, el salmón o las sardinas.
Pero vigila lo que comes…
Por otra parte, no te pases con los alimentos de gran índice glucémico, como los dulces (pasteles, bebidas carbonatadas, chocolate con leche, bollos) y con la comida fast food. Hazlo por tu bienestar general. Y si comes sano regularmente, un día podrás darte un capricho sin que haya consecuencias.
“A priori, el abuso de grasa no es un factor agravante del acné. En cambio, los azúcares rápidos, con un elevado índice de glucemia están implicados en la aparició y la persistencia del acné, tale como los caramelos y demá golosinas, así como el pan de las hamburguesas y las patatas fritas. Inversamente, parece ser que el té verde y sus polifenoles serían beneficiosos para la piel acnéica, limitando la producción de sebo”, resume Víctor Georgescu, dermatólogo y director médico de los Laboratorios dermatológicos Avène.
Los mejores cuidados frente al acné
Mientras vigilas lo que comes, no descuides los mejores cuidados dermocosméticos frente al acné, como los que te recomendamos a continuación.
La última novedad de Avène es Cleanance Comedomed, un concentrado antiimperfecciones que reduce los granos y los puntos negros, especialmente pensado para adolescentes. Pero su efectividad no reside solo en el tratamiento, sino en la prevención: incluye un nuevo activo puntero que ataca el origen de los granos, sus raíces invisibles, a fin de limitar las recidivas. En una semana se ven resultados.
Precio: 19 euros.
Agua micelar de Avène Cleanance. Ayuda a disminuir el exceso de sebo y deja la piel limpia, fresca y tonificada.
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Gel Limpiador Purificante Phys-AC, de A-Derma, es una fórmula de textura ultrafluida y ligermanente espumosa, que limpia con delicadeza las pieles con tendencia acnéica, sin resecarlas.
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Mascarilla Triple Acción Keracnyl, de Ducray. Su fórmula concentrada incluye Myrtacine, que actúa sobre la bacteria responsable de las espinillas; también ácido glicólico, combinado con bolitas exfoliantes; arcilla para absorber el exceso de sebo; y bisabolol y la fase hidro-nutritiva, calma e hidrata para un confort inmediato.
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El serum Keracnyl, de Ducray tiene una triple acción antiimperfecciones, antimarcas, antiedad y es perfecto para mujeres adultas con pieles con problemas.
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El tratamiento Phys-AC Global de A-Derma reduce el exceso de sebo, limita la adhesión de bacterias, disminuye las rojeces por irritación, exfolia y desincrusta los poros.
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Keracnyl Stop Espinillas, de Ducray, es un cuidado de urgencia para aplicar directamente sobre el granito. Ayuda a secarlo y hacerlo desaparecer.
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