¿Cómo es la vida tras el cáncer? ¿Qué cambia, además de tu propia existencia? ¿Puedes pedir un crédito o una hipoteca? ¿Vas a poder seguir trabajando? ¿Te pueden despedir?
Parece que cuando una persona supera un cáncer, la vida va a seguir más o menos igual, pero ya nada es lo mismo. Te enfrentas a las revisiones periódicas y esperas que el “tribunal” dictamine que sigues bien. Y poco a poco vas superando una a una estas reválidas que se han cruzado en tu camino, aunque sigues en la brecha de la vida: trabajas, sales, entras e intentas volver a tu vida anterior. Lo chungo es que esta sociedad no está preparada para vivir con supervivientes.
Octubre es el Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, y todos los medios de comunicación nos llenamos de reportajes y post sobre esta enfermedad, cuáles son los últimos avances médicos, cuáles son los mejores cosméticos, etc.
Esta vez hemos pensado cómo se mueve una persona (mujer) en este mundo que nos ha tocado vivir cuando ha superado un cáncer y tiene que enfrentarse al día a día -bancos, hipotecas, seguros, trabajo…-.
Valérie Dana es editora de la revista La Vida en Rosa, una publicación que no sólo se dedica únicamente al cáncer de mama sino que también se dirige a todas las pacientes, a sus familiares y allegados para que comprendan perfectamente el significado de esta enfermedad. “El cáncer es sinónimo de terremoto tanto para el paciente como para su familia y allegados. Cuando una persona se enfrenta a un cáncer, la vida no puede ser la misma que antes. El diagnóstico, el miedo, los tratamientos nos hacen reflexionar sobre la vida y generalmente todo tiene otro sabor a raíz de la enfermedad. Es una quimera pensar que volveremos a ser la de antes. Ni tú ni yo somos las de hace unos años, semanas o días. La vida es así; con lo cual tras el anuncio de un cáncer, te puedes imaginar el resultado. Eso por un lado. Por otro, está claro que la sociedad no está preparada para vivir con supervivientes, personas que, por ejemplo, tienen nuevas limitaciones en algunos casos. Al nivel médico, ¿quién se debe encargar de ellos? Son preguntas que se están realizando en la sanidad ahora mismo. Hará falta más tiempo para poder atender correctamente a todos ellos porque, afortunadamente, las cifras de supervivientes aumentan año tras año. En lo que se refiere a personas que siguen con la enfermedad pero gracias a los tratamientos pueden volver a una vida “normal”, tampoco estamos listos. Las personas con enfermedad crónica requieren un seguimiento a todos los niveles y España está lejos de poder contestar a estas necesidades”.
Belleza Pura: ¿A qué retos se tiene que enfrentar una persona que ha tenido cáncer?
Valérie Dana: “Los retos son de cada uno. Una mujer que haya sido mastectomizada va a necesitar tiempo para mirarse, aceptarse; se trata de un duelo y la manera de afrontar la situación dependerá de cada una y cada uno. No olvidemos que el cáncer de mama también afecta a hombres (un 2% actualmente) que cuando están diagnosticados suelen tener metástasis porque el tumor se descubre demasiado tarde”.
B. P.: ¿Tiene en realidad los mismos derechos laborales o la miran como si fuera un merengue a punto de caer?
V. D.: “Según el tipo de tumor y sus consecuencias se pide una incapacidad laboral que puede variar según la persona. El tiempo máximo es de un año y luego se valora según la situación personal de cada paciente. La Seguridad Social no siempre escucha al paciente cuando le da el alta… En cuanto a la vuelta al trabajo, depende de cada empresa, de la empatía, de la humanidad de cada jefe. Recibimos testimonios que nos cuentan lo mejor pero también lo peor. También y esto es un llamamiento a las empresas que se convierten en “rosas” durante el mes de octubre o dan dinero a la investigación: que no se olviden de sus trabajadoras que dejan a un lado porque ya no pueden hacer las mismas tareas”.
En el (hipotético) caso de un despido tras la baja por cáncer -que en la realidad no es tan hipotético-, los tribunales han declarado nulo el despido de una trabajadora que se reincorporó tras su baja, aduciendo la empresa “disminución continuada de su actividad laboral” y ya en 2011 el Tribunal Superior de Justicia de Canarias dictó la primera sentencia que declaraba nulo un despido por esta causa.
Otro cantar es si el cáncer te pilla en medio de una prestación de desempleo o eres autónoma. Lo que ocurre en estos caso lo cuentan muy bien desde la Fundación Josep Carreras en este enlace.
Valérie Dana sigue explicando algunos pormenores legales ante un cáncer y se tiene que hacer frente a unos cuantos acontecimientos absolutamente normales en la vida diaria de cualquiera, pero no que lo son tanto en pacientes/supervivientes de una cáncer.
B. P. ¿Tienen que mentir quienes han pasado un cáncer para superar, por ejemplo, el carné de conducir o su renovación?
V. D.: “Es verdad que muchos pacientes han mentido sobre esta cuestión. Pero la situación ha cambiado gracias a la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y a la DGT que han llegado a un acuerdo sobre esta cuestión. Se ha modificado el anexo IV del Reglamento General de Conductores incluyendo un apartado de trastornos oncológicos no hematológicos con influencia en la conducción, con el objetivo de actualizar los requisitos de aptitud psicofísica exigidos, de acuerdo a los avances en los tratamientos y pronósticos del cáncer. Se puede ahora renovar el carné siempre y cuando no se produzcan pérdidas o disminución grave de las capacidades sensitivas, cognitivas o motoras que incidan en la conducción por 5 años y no por 1 como antes, en los casos sin evidencia de enfermedad actual y que no estén recibiendo tratamiento activo”.
B. P.: ¿Y para pedir un crédito o hacerse una póliza de seguro, aunque sea sólo la del coche?
V. D.: “Este tema es delicado. El artículo 10 de la Ley de Contrato de Seguro específica que el tomador del seguro tiene el deber de hacer partícipe a la aseguradora de todas las circunstancias por él conocidas que puedan influir en la valoración del riesgo. Si el usuario oculta datos que podrían impedir obtener cobertura, el asegurador podrá rescindir el contrato en el plazo de un mes desde su conocimiento. Hay compañías de seguros que incluyen el cobro de un capital en caso de padecer cáncer de mama posterior a la contratación. Se está pidiendo al igual que en Francia por ejemplo que se aplique el Derecho al Olvido, es decir que las personas que hayan pasado por un cáncer, sea cual sea su patología, no tengan que mencionar su enfermedad anterior en el cuestionario de salud previo que el seguro les pide que completen, ni tampoco paguen primas extra por ello una vez hayan pasado diez años desde la finalización del protocolo terapéutico para adultos (cirugía, quimioterapia y radioterapia), y cinco años para los diagnosticados hasta los 18 años. Eso ha sido posible en el país vecino gracias a Rose Magazine”.
Hemos preguntado a la compañía Mapfre y nos indican que “un paciente que ha pasado el cáncer puede acceder a un seguro de salud; un seguro de salud se valora casi individualmente, al igual que una persona con obesidad también se le hace un seguro de salud y en función de los riesgos se evalúa su situación, y se les concede un seguro de salud que en algunos casos puede tener alguna restricción y, a veces, la prima puede ser un poquito más elevada”.
Y en el caso de un crédito hipotecario, desde el Banco Santander nos confirman que para conceder uno de estos créditos no se pide ningún documento que indique ninguna valoración sobre la salud de quien lo vaya a contratar.
B. P.: ¿Existe algún tipo de ayuda legal para personas que han sufrido un cáncer?
V. D.: “Cada caso es un mundo. En caso de dudas, nos pueden aconsejar asociaciones de pacientes como la POP (Plataforma de Asociaciones de Pacientes), la Asociación Defensor del Paciente, la AECC por nombrar algunas. Es fundamental entender que tenemos derechos y no hay que bajar los brazos aunque estamos cansados, deprimidos. No hay ninguna razón para que algunos piensen que se puedan aprovechar de la debilidad tanto física como moral de otros seres humanos”.
B. P.: ¿Dónde pueden informarse los supervivientes de un cáncer sobre cómo protegerse legalmente (si es que hay algún sitio).
V. D.: “Siempre hay que dirigirse a páginas especializadas sea en el momento del diagnóstico (aunque se diga que no hay que buscar en Google, casi todo el mundo lo hace), o durante y tras la enfermedad: webs como las de la SEOM (Sociedad Española de Oncología Médica), la AECC, grupos de investigaciones como GEICAM (Investigación en Cáncer de Mama), SOLTI, un grupo académico de investigación de referencia que desarrolla ensayos clínicos de excelencia en cáncer de mama, plataformas de pacientes según el tipo de cáncer. En caso de cáncer de mama, FECMA (Federación Española de Cáncer de Mama) por ejemplo que agrupa asociaciones en todo el país. Todas ellas son seguras. Las que acaban por org. también. Y la nuestra…”
Ya sabéis que la información es fundamental: por eso desde Belleza Pura intentamos daros la mejor.