La mayoría de nosotras nos las vemos y deseamos para lograr perder los kilitos que cogimos tras las vacaciones. Pero, aunque nos resulte extraño, existen mujeres que pasan un verdadero calvario para ganar peso. Hay gente que no engorda ni queriendo.
A pesar de que lo habitual es recurrir a los suplementos, os presentamos una dieta natural con la que podréis volver a lucir curvas.
Es importante que comiences a llevar un diario en el que apuntes las comidas que haces. Así, podrás calibrar si has de aumentar la cantidad ingerida. Recuerda que el peso de los alimentos se calcula una vez cocinados, no crudos.
Lo ideal es comer cada dos o tres horas. Unas seis comidas al día, con el fin de que el organismo no tire de las reservas. No olvides mantener al mínimo el ejercicio vascular ya que no es una dieta para perder grasa, sino para ganar peso. Si deseas o necesitas hacer cardio, que sea una vez por semana y poco tiempo, unos 20 minutos.
En tu menú no pueden faltar las legumbres, la carne, los huevos, el arroz, las ensaladas, el pollo y el pescado, las patatas, todo tipo de pastas, las verduras, la leche y la fruta. Los carbohidratos (pastas, arroz y patatas) nos ayudarán a subir de peso. Los podemos incluir como guarnición en todos los segundos platos. Los batidos de proteína y carbohidratos en polvo y los frutos secos son muy socorridos entre comida y comida.
Algunas ideas pueden ser legumbres con verduras, tortilla de jamón, ensaladilla rusa, legumbres con verduras, filete con patatas, redondo con salsa y puré, pescado rebozado, o pechuga de pollo con pimientos. Trata de ser creativa si quieres dejar de tener el aspecto famélico de Lindsay Lohan. Existen muchos alimentos saludables que puedes combinar y distribuir en varias comidas a lo largo del día. Las comidas grandes no son una buena idea.
Por último, no te obsesiones ni te angusties. Recuerda que es una carrera de fondo. El objetivo es engordar progresivamente y de forma saludable, de 400 a 600 gramos por semana. Este plan ha de llevarse a cabo durante al menos siete meses. Es fundamental ir ganando peso de forma gradual, de una manera sana y equilibrada, escogiendo alimentos nutritivos y evitando aquellos que no son sanos, como las grasas saturadas.