Por fin, un tinte 100% natural o herbal, a base de henna, índigo y cassia, llega a las peluquerías.
Mucho que decir de los tintes a verano 2018 del siglo XXI, cuando todos los peluqueros del mundo asociados a una marca tan profesional como L´Oréal Professionnel que los conecta a través del tinte y otros muchos productos de styling y tratamiento capilar. L´Oréal, qué ha construido su imperio a partir del descubrimiento de la coloración química, gracias al invento del tinte de oxidación por Eugène Schueller.
Pero la henna ya existía y había existido siempre. Era una planta conocida y utilizada desde hace siglos, pero también repudiada en Occidente. No había peluquero que hablara bien de la henna. Creo que en las escuelas de formación de peluquería ya se enseñaba que la henna no tenía comparación con el tinte químico al uso en todas las peluquerías del mundo, ya sea con o sin amoníaco por L´Oréal, Wella o Schwarzkopf; los reyes del mambo del sector. Y en cierta manera sigue siendo así, no existe una coloración más fiable en cuanto a variedad de tonos para satisfacer los deseos de cambio de color de pelo. El procedimiento para pasar de morena a rubia o de castaña a pelirroja exige un cambio de química para que el nuevo pigmento transforme el color de nuestro cabello.
Tengo que confesar que desde los 18 años empecé a usar la henna en casa, disuelta en una infusión de manzanilla. Se forma un barro pastoso y muy engorroso de aplicar, además había que tenerlo 3-4 horas hasta que se secara por completo. El resultado: un cabello cobrizo con un brillo espectacular. Vaya por delante que siempre he tenido buen pelo, pero la única vez en mi vida que me preguntaron sobre el secreto de mi brillo capilar fue en el metro de Madrid, después de haberme dado en casa el emplasto de henna como yo lo llamo. En los 80, sólo había henna de Radhe Shyam en herbolarios o la henna al peso comprada en el mundo árabe o en herbolarios muy escogidos como el de la Calle Pelayo en Madrid.
Yo he probado la henna así al natural y nunca he tenido problemas en el cabello, el verdadero dilema que se plantea siempre con la henna y la coloración a base de hojas botánicas en polvo está en dominar las mezclas con destreza para que el color final se aproxime al deseado, y es una tarea bastante complicada. Con Botanea se han normalizado los tonos a conseguir y se han definido en 13 protocolos, estrictamente en las sabias manos de los peluqueros y tinturistas: los profesionales más indicados.
Sí, he probado Botanea y me ha gustado. No es del todo henna, lleva más plantas, y aceite de coco incorporado, lo que mejora la hidratación del cabello post-coloración. Otra cosa muy buena es que te lo puede hacer tu peluquero de toda la vida sin montar el cristo en casa…
En mi caso, lo probé dos veces porque no daba crédito y quería asegurarme bien lo que recomendaba. La primera vez fue en el nuevo Salón Emotion de L´Oréal y luego en Coolday con el mago del color: Luis Miguel Vecina, todo un artista de la coloración capilar y uno de los mejores tinturistas que conozco, y conozco…
Los llamados barros naturales son una mezcla de agua y polvos vegetales de plantas con la capacidad de teñir y cubrir las canas. Pero su forma de hacerlo no es como la de los tintes químicos con o sin amoníaco que nos aplican en las pelus habitualmente. En este sentido Botanea también se podía considerar un barro porque es el aspecto que tiene cuando te lo aplican, aunque mucho más refinado que cuando haces henna do it yourself!!
Las principales ventajas son coloración 100% herbal y vegana, libre de alérgenos, amoníaco y cualquier otra sustancia química. Más en detalle te diré que matiza mejor las canas y puedes pasar del naranja fuego que te deja la henna pura a un tono más castaño cobrizo si el especialista añade un poco de índigo a la mezcla. Para conseguir los tonos rubios, tu planta a combinar es la Cassia.
Los salones de peluquería enfocan sus servicios de coloración hacia la naturaleza. ¡Viva Botanea!
Estoy encantada, llevaba ya varios años sin aplicar ningún tinte químico sobre mi melena. Gracias por seguir dando color a la vida con un corazón cada día más verde y sostenible.
Doy las gracias a lanzamientos tan importantes como éste, dispuestos a cambiar el color de nuestras cabezas y el pensamiento que hay en ellas, hacía un mundo más sostenible y ecológico.
Por cierto, en el salón Coolday cuentan con grifos eco en los lavacabezas y un montón de ideas para dar brillo y color a tu cabello.
Tel: 914 11 30 55
Calle del Príncipe de Vergara, 89
28006 Madrid