Hordas de corredoras no pueden estar equivocadas
O, al menos, eso intuyo cuando veo pasar ante mí a todas esas mujeres enfundadas en inteligentes tejidos antitranspirantes, felices y sudorosas, con la maquinaria a tope y el pecho bien sujeto.
Correr es uno de los deportes más de moda, y no es difícil explicarse el porqué. Se puede realizar en cualquier parte (incluso cuando viajas), apenas requiere inversión en equipo (con unas buenas zapatillas vas servida) y todo el mundo sabe hacerlo, aunque es importante depurar la técnica para evitar lesiones y molestias.
Las ventajas son incuestionables: ayuda a perder peso y mantener en forma el corazón y los órganos internos, estiliza los músculos y favorece muchísimo el bienestar psíquico gracias al aluvión de endorfinas que produce.
¿Una pega? Al tratarse de un ejercicio de impacto, hay que cuidar especialmente el pecho. El doctor César Casado, Especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora, nos ha contado cómo hacerlo sin renunciar a correr.
Belleza Pura: ¿Cómo debemos cuidar nuestro pecho si somos corredoras?
Doctor César Casado: El efecto concreto del movimiento que provoca el correr sobre el pecho, principalmente por el bote repetido, repercute en una pérdida de firmeza de los tejidos por esa distensión continua, sin que esto implique que la elasticidad no se altere: es decir, una vez distendidos los tejidos, la mama no tiene por qué volver a su forma original.
El pecho está dotado de forma natural de un armazón que lo mantiene en su sitio natural anclando la glándula al músculo, formado por los ligamentos suspensorios de Cooper. También la piel desempeña un papel importante. La pérdida de consistencia de estos ligamentos, motivado por un aumento del peso de la mama, el efecto repetido de esos movimientos de bote o simplemente el envejecimiento, asociado a una distensión cutánea importante, provocará una ptosis precoz del tejido mamario. Un elemento importante de las pacientes corredoras, es que habitualmente no presentan mucho tejido graso, al tener menos índice de masa corporal, que repercute también en la mama, por ello los ligamentos suspensorios y la piel están sometidos a menos carga.
Pensando en ese efecto “bote”, es muy importante que cuando la mujer realice ejercicio físico donde esté presente ese movimiento, utilice sujetadores deportivos adecuados, que minimizarán el efecto sobre el armazón de la mama. Además, se aconsejan otras medidas habituales, como es la hidratación abundante de los tejidos (tanto en forma de crema hidratante como mediante la ingesta de líquidos).
BP: ¿Y si llevamos prótesis?
CC: Si una prótesis se ha implantado adecuadamente, y siempre que no existan importantes variaciones de peso en la paciente o de volumen mamario, la mama requiere idénticos cuidados que una mama no operada, ya que evolucionará de una forma similar a una mama natural. Es cierto que dado que existe un volumen mamario mayor, el peso puede ser mayor, y la mama tendría más tendencia a la caída caso de no cuidarse apropiadamente mediante sujetadores apropiados e hidratación abundante.
BP: ¿Existe alguna prótesis especialmente indicada para corredoras?
CC: Las prótesis se clasifican en redondas o anatómicas (en función de su forma), lisas y rugosas (en función de su textura externa) y de suero o de silicona (en función del relleno). Los impactos repetidos del efecto del correr sobre el pecho, podrían favorecer un desplazamiento sobre su eje del implante (rotación) o en los ejes vertical u horizontal del tórax de la paciente. Si existe rotación de una prótesis redonda, la paciente no lo percibe, cosa que sí es evidente en pacientes que son portadoras de prótesis anatómicas. Estas deben ser conscientes de este riesgo de rotación del implante, que puede ser mayor en corredoras. Respecto al movimiento en los ejes del tórax, personalmente desaconsejo correr durante los tres primeros meses postoperatorios, para permitir que la cápsula que forma el organismo alrededor del implante sea muy ajustada al mismo y además sea más firme, de tal forma que el riesgo de ese desplazamiento sea menor. Las prótesis rugosas a priori crean un efecto velcro más importante del implante con esa cápsula. No hay diferencias en función del contenido del implante (suero o silicona).
BP: ¿Algún consejo de nutrición? (sobre todo enfocado a la menstruación, que es cuando puede aumentar el dolor en las mamas).
CC: Nada en relación con el ejercicio. Principalmente hidratarse con líquidos muy abundantemente. Respecto a la mastalgia, si no se acompaña de otros signos que debiesen preocuparnos (secreción por un pezón, cambio de forma, retracción cutánea…), es suficiente tratarla con antiinflamatorios suaves.
BP: Si tengo el pecho muy grande, ¿es preferible elegir otro deporte?
CC: Si se tiene el pecho grande, hay que buscar un sujetador adecuado, que los hay, o un cirujano plástico para hacer una reducción mamaria. No cambiarse de deporte, es una pena habiendo soluciones tan eficaces.