La lencería erótica del segundo milenio es tan ‘ponible’, que a veces la frontera entre lo privado y lo público se difumina como las tiras que se pierden entre los recovecos del cuerpo. Si el glitter ha logrado saltar del maquillaje de rostro a las nobles nalgas, la joyería no va a la zaga en lo que a decoración corporal se refiere. Te mostramos la renovada lencería erótica de Bijoux Indiscrets, complementos de moda para jugar en pareja, en grupo o incluso salir por ahí si te atreves.
Todo depende de la picardía que le pongas. Lo más interesante de estas ‘prendas’ (¿cuántos centímetros de cuerpo deben estar cubiertos para hablar de ‘prenda’?) es que puedes llevarlas sin nada, como joyas corporales, o con algo debajo, lo que te permite explorar tus límites.
Si te sientes atrevida y el glitter de culo ya no tiene misterios para ti, añade a tu look nalgar la joya de cadenas para la cintura, un complemento de lo más vistoso que puntea tus curvas con una sensual estructura metálica. Se lleva con un tanga debajo o ‘a pelo’, lo que prefieras.
Precio: 39,95 euros.
El arnés de inspiración BDSM transita la línea del imaginario fetichista estilo ‘Historia de O‘. Combina con cualquier prenda que le pongas debajo y además es apto para veganas, el material no es de cuero ni de origen animal. No es que puedas ir con ello a trabajar –en la mayoría de profesiones-, pero tiene su punto para las variopintas formas de ocio nocturnas que ofrece el mundo.
Precio: 60 euros.
Si lo tuyo es la seducción con sentido del humor, no te pierdas los cubrepezones adhesivos con motivos de rayo (Aladdin Sane estaría orgulloso), corazón o estrella. Puedes utilizarlos varias veces y se adaptan a todos los tipos de pecho. Y lo más importante: quedan muy juguetones.
Precio: 12,95 euros.
Puedes encontrar todos estos complementos en la web de Bijoux Indiscrets.