La belleza no es un concepto unívoco y cristalino: admite contradicciones y paradojas. Por ejemplo, que el cactus ofrezca soluciones hidratantes perfectamente válidas y eficaces en cosmética.
La fuerza proviene de sus propias características de supervivencia. Acostumbradas a las condiciones desérticas, las plantas cactáceas saben cómo administrarse el preciado líquido para no perecer ante los estragos de la pertinaz sequía. Pura ‘retención de líquidos’, pero de la que mola y vivifica. Para redondear la jugada maestra de la naturaleza, también absorben una altísima cantidad de nutrientes, de ahí que ciertas especies de cactus resulten tan interesantes a los sabios dermatólogos que formulan nuestras pócimas hidratantes. Directos a tu piel, Kiehl´s y Campo di Fiore te traen los superpoderes del cactus en un envase.
Cactus Flower & Tibetan Ginseng, de Kiehl´s, es una bruma hidratante –presentación muy en boga este año- con flor de cactus para mantener la hidratación en las condiciones más inmisericordes y ginseng tibetano, que aumenta la respiración celular. A esta mezcla botánica se añaden aceites esenciales de Lavanda, Geranio y Romero, que ayudan a desintoxicar la piel y mantenerla a salvo de agentes agresores del medioambiente.
Por la comodidad de esta presentación, puedes repetir la aplicación tantas veces como desees y usarlo para refrescarte el rostro con y sin maquillaje.
Precio: en torno a 25 euros.
La firma nicho Campo di Fiore selecciona el aceite de higo chumbo marroquí por sus cualidades refrescantes, hidratantes y antienvejecimiento. Rico en antioxidantes naturales como la vitamina C, los betacarotenos y el tocoferol (vitamina E), esta fórmula potencia su poder hidratante añadiendo ácido hialurónico. El resultado, promete la enseña, es una piel suave y luminosa sin ningún químico dudoso. ¿El detalle que te terminará de enamorar, a ti que te preocupa la sostenibilidad y la ética en la producción? Los ingredientes provienen del comercio justo.
Precio: 23,85 euros.