Las redes han hablado: la belleza española está de moda. ¿Traducción estética del ya famoso Spanish Make Up? Se está viralizando un look con ADN español (como quien dice, claro) en el que destaca una piel bronceada, unas cejas en clave bold, ojos potentes y labios en rojo pasión.

La belleza a lo Julio Romero de Torres llega a nuestras pantallas amigas en forma de tendencia viral. Tras explorar hasta la saciedad el estilo ‘efortless’ de las francesas, llega el Spanish Make Up con su belleza de rompe y rasga. Hazte con las claves.

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La gente canta con ardor ¡que viva Spanish Make Up!

Quien dice Spanish dice ‘andalusian’, pero esto ya lo sabíamos todas y no debe escandalizarnos. Allende nuestras fronteras, España equivale a paella, toros y flamenco, y el icono de belleza que trasciende y se consolida como ‘típicamente español’ se parece mucho al que llevan las mujeres en la Feria de Abril.

A saber: piel radiante y bronceada, ojos dramáticos, bien marcados con sombras de ojos en tonos terrosos y delineado negro, cejas definidas, labios rojos y vibrantes y colorete en tonos cálidos. Si todo esto se adapta a tu propia paleta cromática, a tu ‘españolidad’ y a tus ganas de divertirte con el maquillaje, ole con ole.

Para recrearlo de forma sencilla, necesitarás unos polvos bronce efecto ‘piel besada por el sol’.  Eliecer Prince, maquillador de Guerlain, recomienda utilizar los polvos únicamente sobre las mejillas, la nariz y la parte central de la frente realizando pequeños círculos con la brocha para conseguir ese efecto ‘sun kissed’.

La mirada, intensa y enmarcada bajo unas cejas potentes, pide a gritos delinear la línea de agua del párpado inferior con el ímpetu del viento. Escoge un lápiz water proof para que te dure más y no temas pasarte con las sombras. Un ahumado en tonos cálidos acompañará perfectamente tu Spanish Make Up pata negra. Tanto las pestañas como las cejas se definen a todo volumen, pero procurando que queden naturales.

Para la boca, apuesta por un rojo con un ligero matiz anaranjado con acabado aterciopelado. Para que queden más sensuales (y ópticamente más voluminosos), marca el centro con un toque de gloss.