Si estás pensando en pasar por quirófano para arreglar esa parte de tu cuerpo que no te gusta, lo primero es elegir un buen cirujano plástico. ¿Sabes cómo buscar el especialista ideal?
Pasar por un quirófano no es una fruslería. Por eso, lo más importante es saber buscar cuál es el cirujano que mejor hace esa operación que tú quieres hacerte. Y para ello existe una especialidad en la carrera de medicina que es Cirugía Estética, Plástica y Reparadora, un programa de 5 años que se cursa después de la licenciatura y tras haber aprobado el examen de MIR (Médico Interno Residente).
Esta especialidad es la que faculta al médico a realizar una operación de cirugía estética. Y no todos los cirujanos están formados en esta especialidad para hacer un implante de mamas, una blefaroplastia o una rinoplastia (por poner las intervenciones más demandadas). Elegir un cirujano plástico es, aunque os parezca un tontería, el primer paso para que la cirugía y los resultados sean satisfactorios.
La formación es la clave. Hace casi dos años, una joven de 22 años –Sara Gómez– falleció después de pasar por el quirófano para hacerse una lipoescultura. El cirujano no era especialista en Cirugía Estética, Plástica y Reparadora; era un cirujano vascular. ¿Cómo es posible que a Sara le operara un vascular? Muy sencillo: la ley del año 1958 dice que un médico cirujano (y todos lo son por el hecho de acabar los estudios de medicina en España) puede realizar cualquier operación. Otra cosa es que sea su especialidad. Para esto están estas especialidades tras los estudios universitarios.
¿En manos de quién vas a poner tu cuerpo y tu vida?
Es vital saber en quién estás poniendo tu cuerpo, tu cara y tu vida. Casi todo el mundo conoce a alguien que se ha aumentado las mamas, se ha hecho una blefaroplastia, una rinoplastia o un lifting. Y sabrás qué tal les ha ido con ese médico. El boca/oreja funciona, pero también los propios cirujanos plásticos han creado asociaciones, como la SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética) o la AECEP (Asociación Española de Cirugía Estética Plástica) donde puedes buscar y elegir un cirujano plástico con garantías.
Si vas a un cirujano y no te gusta, busca otro; elige y compara y no te dejes llevar por cantos de sirena que te lleven hacia uno u otro sin que estés segura de lo que haces. Desde la primera visita que hagas que sea quien te va a operar (o bien su equipo) quien te explore. Tu operación es un acto médico y tiene que llevarla a cabo un especialista. Los comerciales son otra cosa.
Elige un cirujano plástico que te cuide en el hospital
En un centro hospitalario es donde se llevan a cabo la intervenciones quirúrgicas. Solo alguna pequeña intervención se hace en consulta, pero cuando entra ya un anestesista y un quirófano, el cirujano opera en un hospital que tiene que estar homologado. Y es importante que en la intervención esté presente el anestesista y que el centro tiene UVI; seguramente no será necesaria, pero ninguna operación está exenta de riesgos.
Antes de la propia intervención te tienen que hacer pruebas: análisis, electrocardiograma, radiografías… Forman parte del estudio previo a la operación, muy importante para que el cirujano sepa si existe alguna contraindicación y cómo está tu estado de salud.
El mismo día de la operación o quizá algún día antes tienes que firmar el “consentimiento informado”, un documento que pone de manifiesto tu conformidad con lo que te van a realizar.
Es muy importante que sepas cómo va a ser el postoperatorio. Pregunta al médico todo lo que necesites saber, como por ejemplo, cuándo vas a poder hacer tu vida normal, si vas a sentir dolor qué puedes tomarte o contarle qué medicación tienes por si hubiera alguna contraindicación. Por si te sirve, en alguna ocasión, he apuntado en una libreta las preguntas que quiero hacer al médico (así no se me olvida ninguna).
No te sientas nunca cohibida. Es tu operación y estás en tu derecho de preguntar todo lo que se te ocurra. El cirujano no tiene porqué ponerte ninguna traba; es más, estará satisfecho de contestar todas tus preguntas. Y si no te convence, ve a otro y pide una segunda opinión. Es necesaria la buena sintonía entre médico/paciente.
El precio debes hablarlo siempre
Cada operación y cada cirujano pone su precio. La mayoría de las intervenciones que se realizan en España y en casi todos los países se hacen de forma privada; la seguridad social cubre únicamente aquellas cirugías que afecten a la salud de una persona, por ejemplo, cirugías reconstructivas, de mama tras un cáncer, rinoplastia por problemas respiratorios o malformación, blefaroplastia si el párpado caído impide la visión…
No te fíes de ofertas en redes sociales ni en los anuncios de pagar a plazos. O al menos no elijas al cirujano plástico por el precio que veas de oferta. Tu salud tiene un precio. Pregunta siempre.
Y por último…
El caso de Sara Gómez, la joven que falleció tras la intervención ha sido el detonante para que se vea la necesidad de cambiar la ley de 1958 y se luche contra el intrusismo profesional. De momento y de cara al futuro, el 15 de septiembre de 2022 el Congreso de los Diputados aprobó la Proposición no de Ley sobre cirugía estética y lucha contra el intrusismo y las pseudociencias que tiene como objetivo regular la actividad de la cirugía plástica para que se realice por los profesionales formados para ello.