La Unión Europea prohíbe la barra libre de purpurina, glitter y brillis-brillis, entre otros microplásticos habituales en maquillajes, cosméticos (perlas exfoliantes) medicamentos y prendas de ropa (lentejuelas).
Las próximas Navidades habrá menos paillettes y purpurinas gracias a la Comisión Europea. Sin duda esta prohibición es la mejor manera de evitar que estos microplásticos lleguen a nuestro tocador y a los océanos para luego regresar a nuestras mesas en forma de langostinos o pescados.
Nuestra salud está en juego y también la del medioambiente. Pero no todo está perdido en el universo de las tendencias glitter, ya se está investigando en purpurina biodegradable y lo más importante: no contaminante.
¿Dónde están los microplásticos que ha prohibido la Unión Europea, además de en las lentejuelas y la purpurina?
Como son tan tan pequeños, menos de 5 mm de diámetro se les llama microplásticos primarios y nacen del refinado de petróleo. Pero no pongas la mirada solamente en la purpurina porque no es microplástico todo lo que reluce. También se encuentran en cosméticos como la pasta de dientes, en geles de ducha y detergentes, en exfoliantes perlados y en tejidos sintéticos muy festivos. Incluso en las bolas que decoran nuestro árbol de Navidad.
En cuánto a productos cosméticos, además de la purpurina, los microplásticos prohibidos por la Unión Europea se encuentran los polímeros sintéticos: orgánicos, insolubles y resistentes a la degradación. La restricción de la UE utiliza una definición de microplasticos demasiado ancha y no concreta demasiado. Bajo el paraguas de microplásticos pueden aparecer algunas fórmulas que los incluyen para conseguir ciertas texturas, colores y fragancias. También se encuentran en medicamentos (tema del que se cuenta poco), suavizantes de ropa, brillantina, fertilizantes, juguetes, fertilizantes, dispositivos médicos y un largo etcétera.
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En octubre, la Unión Europea aplica la prohibición de la purpurina y restringe los microplásticos añadidos intencionadamente a cualquier producto cosmético o textil.
Desde octubre 2023 y dentro del Plan de Acción contra la Contaminación Cero, la Comisión Europea ha previsto reducir la contaminación por microplásticos en un 30% para 2030. Según la ECHA (Agencia Europea de Sustancias Químicas) no solo contaminan al medioambiente, ahora se suma la preocupación por el salto a la cadena alimentaria. Por la boca no solo muere el pez o el crustáceo; según los expertos las especies marinas más afectadas y que se degustamos tranquilamente en muchos menús.
Con esta nueva normativa, la Comisión reducirá la emisión de medio millón de toneladas de microplásticos.
No cierres los ojos a esta norma que afecta a la industria cosmética y de la moda.
Si tienes el párpado maquillado con purpurina y te acabas de enterar de esta noticia, te ruego que los algodones desmaquillantes no vayan al agua del lavabo, la ducha o el WC. Mejor reciclar a través de los residuos que no sean orgánicos y mucho mejor a los plásticos. El objetivo es que no lleguen al mar y sean ingeridos por la fauna marina y finalmente acaben en las pescaderías para nuestro posterior consumo.
En Belleza Pura ya os habíamos hablado de esta tendencia de moda tóxica, pero hay más microplásticos por definir y que la Unión Europea va a ir prohibiendo a largo plazo. Por supuesto, también hay microplásticos secundarios que surgen de la desintegración de los grandes plásticos: envases, bastoncillos de algodón, palitos de Chupa Chups y también van a dar a la mar.