Los syndet son conocidos como jabones o limpiadores sin jabón. Están formulados con detergentes sintéticos tensioactivos que son mucho más respetuosos con la piel.
Syndet es el acrónimo de synthetic detergent. “Mucha gente confunde el término como si fuesen ‘sin detergentes‘ y es una grave confusión. Sí tienen detergentes, pero son de origen sintético”, afirma Arturo Álvarez Bautista, doctor en Nanomedicina y formulador cosmetológico.
Son detergentes que nuestra piel tolera mejor que un jabón o que un detergente clásico, ya que estos últimos son más agresivos con el manto lipídico de la piel. “Estos detergentes -prosigue Arturo Álvarez Bautista– provienen de la industria de los tensioactivos y ya se empezaron a utilizar en los años 90. El avance científico y sus usos han ido mejorando y las posibilidades de utilizarlos se han abierto”.
Si alguna vez has sentido la piel tirante o con rojeces quizá no estés utilizando el gel adecuado y el manto lipídico de la piel esté alterado. No todos valen para cuidar la piel.
La barrera hidrolipídica es el manto que cubre la última capa de la piel, tiene como función protegerla de agentes externos y evitar la pérdida de agua. Es la barrera que protege la salud de nuestra piel.
Se compone de agua, sebo (grasas y lípidos) y sudor. Cuando estos componentes están en equilibrio, la piel está sana, pero si alguno de estos se desequilibran nuestra piel lo manifiesta. Si la proporción de agua es muy baja, tenemos la piel deshidratada, y si hay un exceso de sebo, nuestra piel está grasa.
Todos estos desequilibrios pueden deberse a la exposición al sol, al viento o a ambientes secos. Y también a agentes químicos, como los jabones que usamos en la ducha. Por eso, no todos valen.
Los syndet limpian igual o incluso mejor
Y, sobre todo, son adecuados para todo el mundo “ya que la función para la que están destinados la cumplen: eliminar la suciedad y el exceso de grasa y partículas, independientemente de que su respeto a la piel”, añade Arturo Álvarez Bautista. Eso sí, no todos los syndet son iguales. “Nos encontramos con catiónicos, aniónicos y anfóteros. Estos últimos son los más respetuosos con la piel, pero a su vez, los más complicados y caros de formular”, incide Álvarez Bautista.
¿Cómo sabemos cuál nos conviene?
“Actualmente -afirma Arturo Álvarez Bautista– la gran mayoría de marcas dermatológicas o de cosmética activa no utilizan detergentes (jabones) clásicos. Por lo tanto, estaremos en el 80% de los casos utilizando syndet. Tenemos que fijarnos en cuál es el objetivo en el producto final y en las características o para qué tipo de problemas ha sido diseñado ese producto más allá del tipo de tensioactivo con el que esté formulado. Por ejemplo un limpiador para pieles con cierta sensibilidad casi siempre contiene los tensioactivos anfóteros, pero lo que nos interesa es la fórmula final y su finalidad”.
Como hay varios tipos, lo mejor es que te dejas aconsejar por tu farmacéutico. Hemos preguntado a Inma Ríu, con farmacia en Barcelona y directora de Farmaschool: “A no ser que sean personas con la piel muy sensible o con atopía, por lo general, el usuario no sabe reconocer un syndet de un jabón tradicional, y es nuestro trabajo explicarle y recomendarle el más adecuado para ellos”.
Si buscas alguna ayuda, en las farmacias hay muchas marcas de jabones sin jabón; por ejemplo, Isdin, Leti, A- Derma, La Roche Posay, Bioderma, Uriage, Babé, Sesderma, Sebamed, Eucerín… De todas formas si buscas un jabón sintético en el envase se leerá claramente: syndet, detergente sintético o jabón sin jabón. No tiene pérdida.