30 años después del Angel original, Thierry Mugler vuelve con una nueva propuesta que explora una surrealista combinación de notas.
Angel Elixir es la nueva fragancia amaderada y floral con tintes enigmáticos de Thierry Mugler. Y quién mejor que la polifacética Hunter Schafer para dar vida a este juego de contrastes.
Hay un nuevo Angel en el firmamento de Thierry Mugler. Una inesperada fragancia encarnada por la actriz, modelo, guionista, directora, productora e icono generacional (lo que quizá sea lo más importante) Hunter Schafer.
Angel Elixir es un contraste de profundas notas amaderadas envueltas en infusión de vainilla, con exclusivas notas lácteas y florales especiadas subyacentes. Una especie de claroscuro -en pintura sería un Caravaggio– que quiere invitar a las mujeres a abrazar las profundidades de su personalidad y revelar su estrella interior. Su ángel.
Para dar vida a esta fragancia, los perfumistas Anne Flipo (quien ha colaborado con marcas como Donna Karan, Burberry, Carolina Herrera, Givenchy o Frederic Malle) y Domitille Michalon-Bertier (Dior, Lancôme, Marc Jacobs o Viktor&Rolf, entre otras) se han apoyado en distintas facetas emocionales.
-Una faceta eufórica: a base de pimienta rosa extraída con CO2. Esto consigue un toque metálico, chispeante y explosivo y evoca la idea de desatar la propia personalidad.
-Una faceta magnética: todos queremos que nuestro perfume sea adictivo. En este caso, se ha buscado ese poder de atracción con flores blancas, ylang-ylang, absoluto de azahar y sándalo y jazmín codestilados. Una combinación única hasta la fecha que consigue una impronta láctea y floral.
-Una faceta de metamorfosis: tras la explosión floral, llegan las notas amaderadas. El sándalo de Nueva Caledonia ofrece una nota cremosa. Envuelto en infusión de vainilla, se acompaña de AmberXtreme™, un ingrediente vanguardista ambarino que potencia la estela de la fragancia.
Como ya hiciera para Shiseido Make Up, Hunter Schafer ejerce de intrigante musa de esta fragancia con un look que interpreta un estilo gótico contemporáneo. Seductora, fascinante y valiente.