El efecto estimulante del café es de sobra conocido (y buscado) por sus millones de consumidores. Que, además, sea un aliado de belleza con aplicaciones para el cuerpo, la mente y el estado anímico añade otra interesante dimensión.

Quizá la pócima que bebían Astérix y su irreductible troupe gala era un delicioso café recién hecho.

Si eres de esas personas que ‘no es persona’ hasta que no se toma su taza de café matutino, contamos con tu receptividad para celebrar las revelaciones más halagüeñas que tenemos sobre tu oscuro objeto de deseo. Ojo: recuerda que lo más sensato es consumir el café con moderación. Así aprovecharás al máximo los beneficios sin que la cafeína afecte a la calidad del sueño. Nos desgrana sus virtudes Carlos Gotor, CEO de la empresa familiar catalana especializada en café BOU.

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Café en grano Five Origins para Expreso, de Bou. 5,20 euros / 170gr.

  1. Poderío antioxidante

Esta seguramente te sonara: el café (como el vino o el té), es rico en polifenoles, microsustancias protectoras de la piel. Los polifenoles, cuenta Carlos Gotor, “son conocidos por su acción antioxidante, que se traduce en neutralizar el daño que producen los radicales libres producidos por factores externos como la contaminación, el estrés o la radiación ultravioleta y que son responsables del envejecimiento prematuro y desencadenantes de la inflamación cutánea”.

  1. Útil contra la celulitis

En cualquier anticelulítico que tengas a mano encontrarás la cafeína. Es un básico de las fórmulas cosméticas destinadas a luchar contra esta situación, y no sólo funciona por vía tópica. La cafeína es un alcaloide “con gran capacidad de ayudar a disolver la grasa acumulada en el organismo y limitar su acumulación. Por otro, a este efecto lipolítico se le suma que la cafeína facilita la microcirculación, esencial para tratar la celulitis”, explica el experto.

  1. Saciante y diurético

Basta tomarse una taza de café a media mañana para comprobar ambos efectos. Y no digamos si lo tomas sin azúcar y le añades una chispa de grasa en forma de mantequilla y aceite de coco, el famoso ‘bulletproof’ que se popularizó en Internet en el entorno de las dietas keto -y que se puede disfrutar de cualquier modo como reemplazo del desayuno en ocasiones puntuales, aunque no sigas este tipo de alimentación-. Además de contribuir al efecto saciante, la grasa enlentece la absorción de la cafeína, por lo que esta llega al flujo sanguíneo de un modo más consistente y duradero.

  1. Ayuda a rendir más en el gym

Demostrado por estudios de la Sociedad Internacional de Nutrición en el Deporte. El consumo moderado de cafeína puede resultar efectivo para mejorar el rendimiento a la hora de practicar ejercicio en alguno de esos gimnasios a los que os acabáis de apuntar, especialmente si es running o atletismo. Lo ideal es tomarse una taza 1 hora antes de la práctica deportiva, que además retarda la aparición de la fatiga y aumenta la capacidad y frecuencia respiratoria. Según la Sociedad Americana de Fisiología, tomar una taza después del deporte ayuda a acelerar la recuperación muscular.

  1. Te hace feliz

Según nos explica Carlos Gotor, “existe una relación directa entre el consumo moderado de café y los pensamientos positivos”. La Escuela de Salud Pública de Harvard lo ha demostrado a partir de los resultados de una muestra de más de 200.000 individuos, quienes mostraron una mejora de la sensación de bienestar que equipara al café con los efectos de un antidepresivo leve. What else?