¿Sabías que… en tu cocina se encuentran ingredientes la mar de útiles para hacer recetas caseras que te ayuden a nutrir el pelo?
Libres de químicos y conservantes, algunas recetas caseras pueden dejar tu pelo sano y brillante por muy poco dinero.
Siempre resultan muy económicas, otro de los atractivos de meterse en harinas y ponerse en el pelo algunas recetas caseras. Lógicamente, no todos los productos capilares de una rutina se pueden -ni se deben- sustituir por los elaborados en casa, pero algunos, ocasionalmente, sí. Te contamos cuáles.
Enjuague clarificante con vinagre de manzana
Clarifi… ¿qué? Un lavado clarificante es el que se da cuando el cuero cabelludo está muy sucio, o bien cuando la hebra tiene demasiado producto de acabado y se ve pesado y plomizo. Además, este enjuague es muy recomendable si se tiene caspa o cuero cabelludo graso, porque el vinagre es un magnífico regulador del pH.
La receta no puede ser más sencilla: sólo necesitas vinagre de manzana con la madre (o sin filtrar, importante que el frasco especifique uno de estos dos conceptos) y agua del grifo. Diluye una buena cucharada en un vaso de agua y aplica la mezcla en tu cuero cabelludo con la ayuda de un atomizador. Frota el cuero cabelludo como si fuera un champú durante 5-10 minutos y aclara con abundante agua. A continuación, sigue con tu rutina como acostumbres, SIN usar champú (ya te has lavado el pelo con este enjuague).
Usado ocasionalmente, deja el pelo suelto, brillante y ultra limpio.
Mascarilla de proteínas
Para cuando tu pelo necesita un buen intensivo de protes. ¡Ojo! Todos los pelos necesitan proteínas, pero quizá no todos necesitan un intensivo. En general, el pelo debe mantener un correcto equilibrio entre hidratación, humectación y proteínas. Notarás que a tu pelo le puede venir bien si no usas productos capilares que las contengan (a revisar INCIs toca, suelen aparecer precedidas por la palabra ‘hydrolyzed’) y si tu pelo está más lacio que de costumbre, excesivamente suave, sin cuerpo, con mucho frizz…
Otra manera de saberlo es el famoso ‘test de la elasticidad’, que puedes hacer con un pelo que se te haya caído (no te lo arranques, por el amor de Dior). Estira la hebra hasta que se rompa. Si lo hace enseguida y sin prácticamente estirar, es posible que tu pelo tenga un nivel de proteínas alto. ¿Se estira un 30% antes de romperse?: el nivel de proteína es normal. Si se estira un 50% o más, quizá necesites proteínas.
Hay tres maneras de hacerte un intensivo de proteínas, ordenadas, a su vez, por orden de eficiencia. Si dudas de si necesitas proteínas, empieza por el principio y, pasado un tiempo, valora si necesitas algo más fuerte.
Agua de arroz.
La elaboración no puede ser más sencilla: sólo tienes que cocer un vaso pequeño de arroz en tres vasos de agua. Una vez haya cocido durante 20 minutos, filtras el agua y deja que se enfríe. Esta agua se aplica sobre el pelo limpio y húmedo a lo largo de todo el pelo. Se deja actuar durante 15-30 minutos y, a continuación, se aclara para seguir con la rutina habitual.
Agua de cerveza.
Una para ti y otra para tu pelo. Necesitarás la suficiente para cubrir tu melena. Déjala abierta reposando para que pierda el gas durante la noche. Cuando te laves el pelo, haz el último enjuague con ella, déjala actuar 5-10 minutos y aclara.
Gelatina: el tratamiento más fuerte. Hazlo únicamente si los anteriores no te han surtido efecto.
Para esto, necesitarás gelatina neutra en láminas o en polvo (un sobre o dos o tres láminas), una taza de agua caliente y una cucharadita de vinagre de manzana.
Mezcla el agua caliente con la gelatina en un bol y remueve hasta que la gelatina se disuelva. Añade el vinagre y remueve de nuevo. A continuación, mete la mezcla en la nevera y déjala enfriar hasta que espese un poco.
Con el pelo limpio y húmedo, aplica la mezcla por secciones en el cabello con delicadeza, distribuyendo bien. El gel se endurecerá rápido, así que hay que hacerlo con cierta presteza. No toques las secciones en las que lo has aplicado (al ir secándose, el pelo se endurecerá y manipularlo te lo puede partir).
Cuando hayas terminado de aplicarlo por todo el pelo, déjalo actuar durante unos 10-20 minutos, y enjuaga el tratamiento con agua tibia, sin sacudir el pelo hasta que hayas arrastrado toda la mezcla. Después, y dado que la proteína tiende a resecar un poco, ponte una mascarilla hidratante y déjala actuar durante el tiempo que necesites.
Gel de lino, la semilla de un buen rizo
Un fijador estrella, y una de las recetas caseras para el pelo más populares en el mundillo curly. Se hace en un pis pas y ayuda a definir los rizos y ondas, aportando suavidad y brillo.
Para hacerlo, hierve una cucharada de semillas de lino en dos vasos de agua destilada. A esto puedes añadir clavo si eres morena o canela si eres rubia (ayudan a conservar la mezcla). Ve removiendo con un tenedor y sacándolo del recipiente de vez; sabrás que está listo cuando saques un hilito de ‘babilla’ del tenedor. Cuélalo rápidamente, de lo contrario, se endurecerá y no podrás manejarlo, y deja que se enfríe. Úsalo como cualquier otro gel de definición.