Deporte y baile danzan de la mano en esta disciplina que anima a ‘sudar’ las preocupaciones y liberar endorfinas.
Esta danza es un original entrenamiento de 2 horas.
Es una nueva propuesta de ejercicio que se empieza a extender por algunos centros deportivos. Uno de los primeros en incorporarla ha sido Gymage Madrid. Los últimos domingos de cada mes, a las 11 de la mañana, propone movilizar el cuerpo y la mente a ritmo de danza intuitiva de Moov Madrid.
Una manera de mover de liberar las emociones donde los prejuicios y los pudores deben dejarse en la puerta. Una especie de trance en el que el cuerpo responde a la música, sin ataduras y dejándose llevar por los sentimientos más primarios. ¡Déjate llevar!
Danza intuitiva, ¿qué es?
Esta disciplina no es nueva pero si era una práctica minoritaria. Una manera de reconectar con el cuerpo vinculada a grupos de mujeres y muy unida a la meditación. Ahora, la coreógrafa suizo-italiana y actriz profesional Anima May, ha creado su propia interpretación que enseña en el espacio Gymage Theater.
Su objetivo es “apagar la mente y detonar endorfinas en el cuerpo, logrando experimentar explosiones de felicidad, y conectar con personas que comparten la misma vibración”. Y todo ello se logra a través de la música, el movimiento y los mensajes con los que va guiando la sesión y con los que logra un estado de sugestión.
Así es una sesión de danza intuitiva.
– Todo comienza con una charla mental, y como explica Anima May es normal que “la mente intente distraerte y contarte todo lo que no funciona. Puede desencadenar sentimientos de inseguridad… No te preocupes, esto es normal. Pase lo que pase, deja que pase. Se trata de no identificarse con ello”.
– Después, empieza el movimiento, es el momento de no ceder a las distracciones de los pensamientos. Comienza a sentirse y a ser conscientes de cada parte del cuerpo a través del movimiento.
– Bioquímica. El movimiento continuo y el ritmo intenso de la música comienzan a desencadenar emociones agradables y desagradables. El cerebro desencadena todo tipo de reacciones bioquímicas.
– Dejarse ir. Es el momento de soltar sentimientos y confiar en el cuerpo y disfrutar del movimiento sin juzgar.
– Celebración. Llegado a este punto, se trata solo de disfrutar. De entregarse a los sentimientos de liberación y de compartir la energía positiva con los demás.