El distintivo B-Corps no es un certificado cualquiera; es la gran recompensa a las empresas que apuestan por su compromiso con la sostenibilidad social, el medio ambiente, la biodiversidad y la protección del clima.
Marzo es el mes de las B-Corps. Las 4.400 empresas que exhiben este certificado lo celebran el mes que viene junto con las empresas avaladas con los más altos estándares de sostenibilidad. B-Corp proviene de Benefit Corporation. Esta iniciativa estadounidense lanzada por B Lab, una organización sin fines de lucro fundada en 2006, se puso en marcha para distinguir a las empresas que no solo persiguen el beneficio económico sino también el social y el ambiental.
La misión de B-Corp es liderar un movimiento global de personas que utilizan la fuerza de las empresas como motor de cambio. Las B-Corps son compañías que están construyendo una economía más inclusiva y sostenible para todas las personas y el planeta. Deben cumplir con los más altos estándares de desempeño social y ambiental, transparencia pública y responsabilidad legal. Se les exige legalmente que tengan en cuenta en la toma de decisiones a sus trabajadores. En este movimiento ya hay 4.400 empresas de 77 países en 153 sectores con un único objetivo: transformar la economía global para beneficiar a todas las personas, comunidades y el planeta y que, en consecuencia, todos caminemos hacia un bienestar total y compartido. Marcas como Weleda, Isdin, The Body Shop o Davines ya forman parte de esta comunidad. Y nosotros, como usuarios de esas marcas, sabemos que hacen bien las cosas.
No es una tarea sencilla; estamos ante un reto mundial al que no todas las empresas pueden acceder. Aunque no lo creáis es un certificado muy importante para las compañías porque es el sello que reconoce su trayectoria. Y en un mundo tan complejo, distinguirse es vital.
Es un camino largo que se consigue cuando quieres cambiar el mundo. Ser B-Corp es la forma más poderosa de generar credibilidad, confianza y valor para una empresa en este mundo donde ya es tendencia ser sostenible en todos los sentidos.
Y no hace falta ser una empresa, porque ya hay millones de personas, inversores, trabajadores, universidades y organizaciones de todo tipo en todo el mundo que cada día alinean sus decisiones con el tipo de sociedad que quieren construir.
El sello B-Corp está en todos los sectores, y en la belleza también
Este sello ha llegado a todos los sectores, desde el eléctrico, por ejemplo, a las empresas de comunicación, industria farmacéutica, restauración, ropa, calzado, seguros, por supuesto, la belleza, y hasta empresas de botellas reutilizables, como la española Nuoc, un referente del sector de botellas lifestyle.
Una de las última empresas en adherirse al B-Corps es Weleda. “Estamos orgullosos de formar parte de un grupo de empresas comprometidas con un mundo mejor, enfocadas en el impacto social y sostenible. Con la friolera de 106,9 puntos, Weleda superó el mínimo obligatorio de 80 puntos, lo que lo convierte en uno de los más altos de la industria”, dice su nota de prensa. Y están orgullosos porque han entrado en la comunidad de las mejores empresas del mundo.
Porque para exhibir este certificado hay que cumplir un gran número de diferentes parámetros que hacen destacar su empresa como una compañía que va más allá de un beneficio económico y busca resolver problemas sociales y ambientales. Si consigue más de 80 puntos es el primer paso para la certificación.
Davines: para hacer belleza a base de bien
Hacer belleza a base de bien, del bien hacer, es lo que ha llevado a la marca italiana a lograr hace un par de años el certificado B-Corps. Desde hace tiempo, Davines realiza muchos proyectos para la salvaguardia del planeta y las personas ocupándose de temas como el problema de los plásticos, la descarbonización o la agricultura regenerativa.
Cada año hay más B-Corps… por algo será
Entrar en este club exclusivo es un punto extra para cualquier empresa, y algunas llevan años trabajando de manera sostenible. Por ejemplo, The Body Shop, otra de las marcas que ha recibido el sello por haber mantenido durante más de 45 años sus principios, trabajando de manera justa con los agricultores, sin testar en animales (aunque ahora ya no esté permitido en el UE) y apoyando el comercio justo.
Otra de las empresas de cosmética y belleza que puede lucir su B-Corps es Isdin, que ha sido la primera marca española de dermocosmética en obtener este sello gracias a su compromiso con el bienestar y el cuidado de la piel y la salud de las personas, del medio ambiente, de sus empleados y de sus clientes.
Habrá más marcas que puedan adherirse a este sello tan privilegiado al que muchos aspiran. No es fácil cumplir los estándares que pide la organización. Pero ser la mejor marca tiene su recompensa: estar con los mejores.