Por fin se acaba el 2020, el año que vivimos peligrosamente, al filo de la navaja, con el miedo metido en el cuerpo. ¿Ha tenido algo positivo el año 2020? ¿Tú que crees?
Para todos, el año 2020 está siendo un año para tacharlo, como ha hecho la revista Time en su portada de la primera semana de diciembre. Dicen en el semanario estadounidense que “2020 nos ha puesto a prueba más allá de cualquier otro. ¿A dónde vamos a ir después de esto?“
Es difícil ver algo positivo en el año 2020, no os lo voy a negar. Pero habrán nacido niños, se habrán enamorado parejas… ¡Algo bueno habrá habido! Hay que mantener la fe y la esperanza.
Always look on the bright side of life o Mira siempre el lado positivo de la vida cantaban los Monty Python en la película La vida de Brian mientras estaban crucificados (si no la habéis visto, no os la perdáis durante estas fiestas que no van a ser como siempre).
2020 es el mal año, ese que todos quisiéramos borrar de nuestras vidas. Pegados al televisor o a cualquier otro medio de comunicación, hemos visto cómo se nos han roto los planes que habíamos hecho para este bisiesto. ¿Alguien ha tenido pensamiento positivo durante estos 12 meses?
¿Bienvenido 2020?
A las 12 de la noche del 31 de diciembre de 2019 todos brindamos con champán esperando lo mejor para el año. Confeti, copas, besos, abrazos, ilusiones, proyectos, ideas nuevas y, de pronto… el 11 de marzo, la OMS confirma que “hemos llegado a la conclusión de que la Covid-19 puede considerarse una pandemia“.
Horror, pandemia. ¿Qué hacemos?
¡Qué desazón! Todos despistados y asustados. Así no podemos encontrar algo positivo en este annus horribilis? Imposible ver el lado bueno de la vida, hemos pensado más de una vez mientras nos asomábamos a la ventana durante lo más duro del confinamiento y veíamos las calles vacías. Ni un alma.
Se acabaron los abrazos, los besos, ya no nos pintarnos los labios (total, para qué si no se nos ve con la mascarilla).Todo el día lavándonos las manos, pensando en el gel hidroalcohólico, viendo que la gente se moría a chorros, aplaudiendo a los sanitarios para darles calor y aliento en esas largas jornadas, asistiendo con estupor a las manifestaciones negacionistas (la pandemia es un bulo), buscando mascarillas al principio del confinamiento, viendo a Mr Trump que comparaba el coronavirus con una gripe o asistiendo estupefactos al hilarante discurso de Miguel Bosé que afirmaba que una élite había creado la Covid-19 para vacunar a toda la humanidad y así implantarnos un chip para controlarnos.
¿Y si ha habido algo positivo en 2020?
Sin embargo, en medio de los nubarrones de la Covid-19 algún rayo habrá iluminado nuestra existencia, habremos visto esa peli que nos quedamos con ganas de ver o habremos decorado nuestra casa para hacerla más cómoda, habremos retomado la amistad por zoom con amigos que antes no veíamos o nos habremos reencontrado con nuestra pareja. ¡Quién sabe!
Habrá nacido un niño. Han nacido muchos niños. Muchos adolescentes han entrado en la Universidad. Se han casado parejas. Otros han encontrado su media naranja. Habrá quien haya aprendido a cocinar. Muchos hemos hecho cosas que no sabíamos ni que sabíamos hacerlas.
Lo bueno de 2020 para las Bellezas Puras
Beatriz Peña, la jefa de Belleza Pura dice que lo mejor ha sido hacer yoga, el descanso, el autocuidado, que hay menos contaminación y más unión con la naturaleza.
Diana Domingo ha aprendido muchísimo con la experiencia, “he tenido que calmarme, escuchar a mi pareja, que es la ‘voz de la templanza’, he hecho de profe de mi hijo pequeño Teo, he descubierto nuevos sistemas más sostenibles de entrenamiento y estoy más ‘fit’ que nunca (de eso estoy segura), he recuperado actividades abandonadas, como el dibujo, y tengo más trabajo que antes de la pandemia”.
Abigail Campos (Abi) me dice que lo más positivo de 2020 ha sido pasar más tiempo con sus hijas.
Para Eva Reus lo positivo ha sido que no ha pasado la Covid-19.
Malva Rico, con 2 niños pequeños, dice que ha tenido muy buenos momentos a pesar de estos meses de locos. “Ha habido bastante armonía entre los 4 y el confinamiento, que a otras parejas les ha pasado factura, creo que a nosotros nos ha unido más”. Además, han instaurado la cena todos juntos a las 8 de la tarde (muy bien eso del horario europeo) y se han lanzado a hacer pan.
Sin embargo, a mí sí me parece positivo haber pasado la Covid-19; supongo que me lo parece porque ha sido leve y me da la impresión de que me he quitado un peso de encima. Eso sí, sigo extremando los cuidados. Además, como he tenido más tiempo, he retomado la lectura que había abandonado por mor de las prisas, y he vuelto a devorar libros.
Y, por último, me ha llegado al alma lo que me ha contado mi amigo Jesús, que me ha contado lo bueno del año que acaba: lo mejor “las dos semanas con Mayte y su hijo en la playa, y ver a mi padre atendido y poderle ver” (Con más de 90 años y alzheimer, ha superado el coronavirus).
Sí, siempre hay que ver el lado bueno de las cosas…
¿Nos contáis lo positivo de este año?