Tener unas cejas a la medida, bien proporcionadas y adecuadas a tu rostro no es tan fácil. Las manos de un experto pueden ayudarte a dar con las que mejor te sienten.
Las cejas de la reina Letizia son blanco de muchas miradas. Es verdad: son unas cejas hechas a medida, perfectas y con un arco muy natural. Últimamente con la mascarilla como accesorio (no queda otra incluso para una reina) son el marco perfecto y el centro de todas las miradas.
Igual que la Reina, podemos aspirar a tener unas cejas a la medida. Es cuestión de proponérselo.
Las cejas solían ser las grandes olvidadas de nuestro ritual; un día nos quitamos un pelito, al otro día vemos que nos sobra otro en el entrecejo y lo quitamos y de vez en cuando tenemos que ir a hacernos las cejas porque la selva del Amazonas parece un páramo en comparación con ellas.
Pero ahora, con la Covid instaurada en nuestras vidas (bicho, vete ya), las nuevas medidas de seguridad y el uso de la mascarilla, nuestra mirada es nuestra nueva sonrisa y con ella nos comunicamos con el de enfrente.
¿Qué ceja necesito?
Encontrar la forma de la ceja que funcione con tu rostro no es siempre fácil. Hay centros que se dedican a dejarte esa ceja que dará a tu cara un nuevo aspecto.
Angelina Jolie, por ejemplo, es un claro ejemplo de un rostro cuadrado. Desde la marca Lilash recomiendan que si ésta es tu forma, optes por una ceja poblada y circunfleja para dulcificar un poquito tus rasgos.
¿Cara ovalada?
Si tu cara es más ovalada, tipo Jenifer Aniston, es mejor que las depiles de forma redondeada para dar relevancia a tu rostro.
¿Óvalo triangular como el de Victoria Beckham?
Una barbilla tan marcada como la de la ex Spice Girl te pide descartar un diseño recto y apostar por una cejas más circunflejas y redondeadas para suavizar la forma puntiaguda de tu mentón.
Antes que ponerte a depilar y a depilar, deja las cejas en barbecho para que luego esas cejas a la medida de tu cara queden perfectas, como las de estas actrices/celebrities. Si te has pasado y luego no crecen los pelillos vas a tener que recurrir a la micropigmentación, que en buenas manos da unos resultados magníficos. Yo misma probé una micropigmentación y mis cejas quedaron de lujo.
De todas formas, las cejas también se cuidan; no creas que no hay que hacerlas nada: un buen suero hará maravillas. Por ejemplo, el LiBrown de Lilash (98 euros) fortalece y acondiciona los folículos pilosos de tus cejas.
Otro producto que puedes aplicar a tus cejas y que tiene mil años es el aceite de ricino, rico en vitamina E y ácidos grasos que estimula la producción de colágeno y elastina.
No sé si llegarás al nivel de la reina Letizia pero lo que sí es seguro es que tus cejas tendrán un nivel casi real.