Mascné es la nueva alteración cutánea ocasionada por el uso de las mascarillas. Este tipo de acné hay que cuidarlo para evitar que siga proliferando.
Acné, dermatitis, rosácea, foliculitis… Estos son algunos de los problemas que se están encontrando en los consultorios médicos y en los gabinetes estéticos desde que la Covid-19 ha entrado en nuestras vidas. El mascné está propiciado por la combinación de presión, fricción, oclusión, frotamiento y calor, y se caracteriza por la aparición de comedones, pápulas y póstulas en la zona cubiertas por ropas, en este caso por la mascarilla.
Si estás padeciendo mascné, te interesa leer este post. Si no, seguro que alguien cercano a ti lo está sufriendo.
Algo tan común como el acné, que afecta al 90% de la población adolescente o joven y a un buen número de personas adultas, ha encontrado su caldo de cultivo en la Covid-19 con el uso necesario de las mascarillas. Mientras las mascarillas formen parte de nuestro atuendo habitual será más frecuente esta alteración de la piel.
Cuando el virus se vaya o lo ataquemos con alguna vacuna -que pasará, que no os quepa ninguna duda-, el mascné será un mal recuerdo.
¿Por qué se produce el mascné?
Ahora está afectando a cualquier persona. “Es normal -explica Cristina Galmiche, esteticista especializada en acné, y Premio Salon Look 2019 a la mejor esteticista– porque la piel no está respirando y nuestra temperatura es más alta debido a nuestro aliento. Ahí se forma un ambiente muy propicio para la proliferación de las bacterias. Aquellas personas que tienen grasa retenida, ésta se queda en el conducto del folículo piloso”.
“Las pieles sensibles o aquellas que no están tratadas de manera correcta, como por ejemplo, con una exfoliación excesiva o tratamiento invasivos también son proclives a padecer mascné”, continúa Cristina Galmiche.
Las pieles sanas también pueden encontrarse con esta alteración. “Puede que hayan empeorado por las mascarillas -nos cuenta la esteticista-. Si salen granitos es porque esa poquita grasa que se ha generado se ha quedado dura en el conducto excretor del folículo. Para que haya grano tiene que haber grasa; si no la hay, no hay grano y no se forma la infección”. El método que Cristina Galmiche trabaja es la oxigenación poro a poro, una limpieza que reduce la grasa y poco a poco va eliminando el acné.
La solución está en tu mano
Tratar mascné no es complicado. Es un proceso sencillo aunque hay que ser muy constante, igual que para todos los procesos en la piel.
Los consejos de la facialista pasan por hacer una limpieza suave utilizando una leche limpiadora eliminándola con pañuelos faciales de papel y aplicando después una loción sin alcohol para calmar la piel. Lo que no puede faltar es una protección solar y una crema suave como la de su propia firma, Balance Plus.
Lo que hay que evitar son los ácidos, ni glicólico ni retinol, y los cepillos de limpieza facial, ya que para Cristina Galmiche hacen más sensible la piel, y de lo que se trata es de recuperar esa piel.
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El doctor Ricardo Ruiz, dermatológo de la Clínica Dermatológica Internacional, apuesta por un jabón hipoalergénico suave y una crema hidratante no comedogénica. Además, recomienda no utilizar maquillaje y usar el fotoprotector solar. Tampoco recomienda los ácidos porque pueden irritar más al haber oclusión y humedad durante el día.
Es fundamental que cambies la mascarilla cada día. Con estos consejos podrás mantener alejado ese mascné que, desgraciadamente, se ha “puesto de moda”.