Si tecleas ‘barra de labios’ en Google, los motores de búsqueda te ofrecen la apostilla ‘de Chanel’ para completar la frase. ¿Por qué será?
Habemus nueva edición limitada para coleccionistas, para neófitas, para turistas rusas y para amantes de la vida y del amor. Lucía Pica, diseñadora de color de Chanel, nos lo dice con flores. Con una camelia concretamente, como no podía ser de otro modo.
La emblemática flor de la casa se traslada a unos labiales que inspiran un alocado deseo de posesión. La paleta comprende 8 tonos que exploran una gama apta para atrevidas, millennials y centennials: del rosa palo al color púrpura. La actriz Kristen Stewart presta su mucosa labial -entre otros atributos- para exponer el resultado. Quien se resista no es de este mundo.
El matiz define el acabado de esta nueva colección de Chanel. Rouge Allure Camélia se encuentra en dos efectos, brillo (Rouge Allure) o mate (Rouge Allure Velvet). Seda o terciopelo. En cualquiera de los dos casos, el confort está garantizado.
Para las fórmulas, se han empleado pigmentos ultrafinos que consiguen tonos intensos en una sola pasada. Los aceites de almendras dulces y de jojoba prometen larga duración y unos labios lisos, hidratados y protegidos.
La propuesta mate cuenta con una combinación de esferas Soft Focus y nácares ultrafinos para no perder de vista la luminosidad.
Encontraremos una camelia dorada en la tapa del siempre elegantísimo (y práctico) envase. Propuesta a cero riesgos.
Se puede aplicar directamente sobre los labios -gesto cotidiano- o bien embarcarse en un proyecto más ambicioso definiendo el contorno con Le Crayon Lèvres y aplicando la barra con el pincel del lápiz -como haría Lucía Pica, sin ir más lejos-.
Rouge Allure Camélia ya está a la venta en los puntos de Chanel.
Precio: 38 euros.