Comida italiana, llena de frescura, tradición y con la misma pasión que Fellina o Giulietta, Antonella sirve buena pasta y mejores pizzas.
Y allí nos vimos las caras parte del equipo de Belleza Pura en una de nuestras memorables comidas caseras, que muchas veces son en casa de alguna porque cocinamos bien, a qué negarlo. Pero no tenemos tiempo para llegar a todo, conciliando con la vida.
“Porque una cosa es cocinar para relajarse y disfrutar del placer de llevar a la práctica esa receta que nos apetece, y otra muy diferente dar de comer o hacer la cena porque la familia tiene que comer”, como bien dijo nuestra querida Abigail Campos, nueva y flamante incorporación al equipo de Belleza Pura.
Menos mal que estaba Antonella cerca para acogernos a todas en su cálido restaurante con espíritu mediterráneo y alimentos saludables.
Ubicada entre Towanda y Eulalia Sacristán, y a las puertas de la maravillosa terraza de Antonella en el momento más dulce, los postres.
Como profesionales del periodismo de belleza y salud, nos fiamos de los buenos cocineros a la hora de juntarnos a comer y disfrutar de una larga sobremesa precedida de buenos postres. ¡Qué rico el tiramisú de Antonella, servido en cafetera italiana, por supuesto!
Y qué Belleza Pura tienen todas las mujeres que forman parte de este equipo que se quiere, se apoya y se ríe a carcajadas entre plato y plato. Es que tenemos que quedar más a comer o a beber… y no lo digo por mí que me tomé dos cervecitas sin alcohol de Heineken y no probé ni el Limoncello.
Sin embargo, el Vitello Tonato, mi plato preferido, desapareció del plato hasta dejarlo tan limpio como si acabara de salir del lavavajillas. ¡¡ chup, chup !!
Comimos muy bien y es un sitio perfecto para quedar con amigas porque es tranquilo y pudimos compartir deliciosos platos de comida casera recién hecha, sin congelados ni microondas de por medio como ocurre en otras cadenas de restaurantes italianos y no quiero señalar a ninguno.
Es de los sitios donde puedes hablar y escuchar a los demás porque no hay un ruido de fondo insoportable. Sí, somos latinos y hablamos alto pero la sonoridad y la sororidad son importantes, además del diseño de interiores. Mérito de la interiorista Marta Banús (Le Cocó, El Columpio y Giulietta), nos traslada a una casa de campo en La Toscana en este precioso local en amarillo limón.
No voy a contar conversaciones secretas y un tanto íntimas que siempre surgen cuando nos juntamos porque hablamos muy poco de trabajo y mucho de los hijos, los papás, ex-maridos, amantes bandidos y viajes furtivos. También hablamos de los documentales de La 2, el cambio climático, la saturación de plásticos y el reciclaje…
Ya a los postres, hubo intercambio de cosméticos, maquillajes y productos capilares, claro que sí.
“¡Ay, estas comidas entre mujeres deberían recetarse, y de hecho Eva Reuss, que no pudo venir, las tiene recomendadísimas. Malva Rico tuvo que darse de baja en el último momento por un problema de canguro para sus pequeños vástagos. ¿A quién no le ha pasado? Habrá más comidas, tranquis…”
Con tanta agenda nos cuesta salir de casa, sobre todo porque no hemos parado de entrar y salir en toda la semana. Especialmente un viernes cuando Madrid está totalmente atascado y un millón de coches saliendo en masa y a escasa velocidad. Pero con muchas ganas de darse el piro que se dice por el foro…
Empieza ese “finde” que un viernes a la hora de comer parece no tener fin y con esta gran comida a la italiana, menos.
¡¡¡¡¡ Grazie mille por esas focaccias tan tiernas como el Parmigiano Reggiano y esos Tortelloni Giganti !!!!
Ciao, Antonella, buon appetito e buon divertimento!
Como en todos los restaurantes del grupo Le Cocó, hay opciones igualmente apetecibles para veganos, vegetarianos y celiacos, y las mascotas -bien educadas- son bienvenidas como uno más de la familia.
Antonella
C/Diego Ayllón 16. (Zona Arturo Soria)
Madrid
Tel: 917 590 436
angeles dice:
Beatriz Peña 
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