El método Pilates ayuda a acabar con los dolores de espalda y corrige la postura.
Quienes lo han probado tienen un comportamiento similar a los conversos de una secta. Pueden estar horas hablando de los beneficios de su práctica, no hay un solo pero (como mucho, que es aburrido) y su entusiasmo resulta, para qué negarlo, tremendamente convincente.
Probablemente ya estés puesta en la mitología pilatiana pero, por si acaso, te recuerdo la bonita y motivacional historia del señor Pilates en su versión de niño Pilates, una criatura enfermiza, enclenque y lúcida que entendió muy temprano que la única manera que tenía de superar sus limitaciones era fortalecer su cuerpo mediante el ejercicio. Gracias a sus investigaciones y a su esfuerzo de superación personal, desarrolló el método y sus sistemas de poleas y cuerdas que hoy son mundialmente conocidos.
Además de mejorar los dolores de espalda hasta acabar prácticamente con ellos, el método Pilates corrige los problemas de alineación postural, fortalece el abdomen, estiliza la figura y aumenta la flexibilidad. Por si todo ello fuera baladí, y dado que es una práctica que exige mucha concentración, mejora la capacidad de estar en el aquí y ahora y reduce el estrés y la ansiedad. ¿Lo mejor? La amplitud y variedad de su público objetivo: cualquier persona, en cualquier condición física, y a cualquier edad, puede entregarse alegremente a este ejercicio –siempre bajo la tutela de profesionales formados- sin temer por sus articulaciones.
Encontrar el sitio fetén puede ser un poco más complicado. Muchos gimnasios ofrecen clases colectivas en suelo o bien con máquinas. También hay estudios dedicados en cuerpo y alma a esta disciplina. La mayoría ofrece una sesión gratuita de prueba, como esta que acompaña el post. Con 3 clases a la semana suele ser suficiente para notar los beneficios.
Como el yoga, andar o el sexo, es de esos ejercicios sostenibles que vale la pena incorporar a los hábitos.
Pilates Boadilla
Avenida Nuevo Mundo, 5.
28660, Madrid.
Tel: 916327278.