Te enseñamos cómo interpretar la complicada lista de ingredientes de tus productos de cosmética.
INCI significa “International Nomenclature Cosmetic Ingredient”, en español, “Nomenclatura Internacional de Ingredientes Cosméticos”. Se trata simple -o no tan simple- y llanamente del listado de todos los ingredientes que lleva un cosmético, pero su interpretación es tan difícil, que se necesitan casi estudios de formulación para comprender lo que te estás llevando al rostro, al cuerpo o al pelo.
Ahora que se habla mucho del INCI puede parecer algo nuevo, pero su uso es obligatorio en toda la Unión Europea desde 1998 –en Estados Unidos desde los años 80-. El porqué de su resurgir hay que buscarlo probablemente en un consumidor cada vez más preocupado y consciente que ha decidido sacar la lupa para analizar al detalle lo que llevan sus cosméticos. La información es poder y saber leer el listado de ingredientes puede ser sumamente importante si, por ejemplo, tienes alguna alergia, pero también te servirá para comparar dos productos con la misma formulación, intuir su eficacia por las concentraciones, detectar ingredientes nocivos, etc.
Empecemos conociendo algunos datos importantes:
- Los ingredientes se colocan en orden decreciente de concentración, es decir, los que aparecen primero son los que se encuentran en mayores proporciones y los últimos, los que están presentes en cantidades más pequeñas.
- Si la concentración es inferior al 1% pueden mencionarse sin orden después de los que tengan una concentración superior.
- Los colorantes deben ir precedidos por las iniciales C.I –Color Index- seguida del correspondiente número.
- Los nanomatariales deben aparecer identificados como “nano”.
- El fabricante puede solicitar por confidencialidad la exclusión de varios ingredientes del listado.
- Los derivados de plantas aparecen con su nombre científico en latín –la nomenclatura sistema Linneo-.
- Los derivados de perfumes sintéticos alérgenos, que son un total de 26 compuestos, deben constar obligatoriamente en la lista de ingredientes de un cosmético si están a concentraciones superiores al 0,001% en los productos que no deben enjuagarse después de su aplicación, y del 0,01% en los productos que deben enjuagarse. Son: Amyl cinnamal. Benzyl alcohol. Cinnamyl alcohol. Citral. Eugenol. Hydroxy-citronellal. Isoeugenol. Amylcin-namyl alcohol. Benzyl salicylate. Cinnamal. Coumarin. Geraniol. Anisyl alcohol. Benzyl cinnamate. Farnesol. 2-(4-tert-Butylbenzyl) propionald-hyd o lilial o butyl phenyl methylpropional. Linalool.Benzyl benzoate. Citronellol. Hexyl cinnam-aldehyd. d-Limonene. Methyl heptin carbonate. 3-Methyl-4-(2,6,6-tri-methyl-2-cyclohexen-1-yl)-3-buten-2-one. Oak moss and treemoss extract. Treemoss extract. Hydroxymethylpentylcyclohexenecarboxaldehyd.
Con estas premisas claras, es momento de sacar la lupa y fijarnos más detenidamente en algunos ingredientes sobre los que hay muchas voces que cuestionan su inocuidad y que están recogidos, por ejemplo, en la Guía de bolsillo de la Red Ecoestética -cofinanciada por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medioambiente, la Fundación Biodiversidad, Emplea Verde, la UE y la Asociación Vida Sana).
- Parabenos. Son conservantes derivados en su mayoría del petróleo y se esconden bajo nombres como Phenoxyethanol, Propylparaben, Butylparaben o Methylparaben, todos ellos demostrados disruptores hormonales.
- Sulfatos. Son los detergentes que proporcionan a geles, jabones y champús su acción limpiadora. Ojo si tus cosméticos tienen: Disodium Laureth Sulfosuccinate, Sodium Laureth Sulfate, Sodium Lauryl Sulfate, Sodium Lauryl Sulfoacetate, Sodium Myreth Sulfate, Sodium Polynaphthalensulfonate, Sodium Trideceth Sulfate o Sodium Xylenesulfonate.
- Ftalatos: su función es fijar las fragancias, pero también tienen capacidad plastificante –ayudan a que las lacas de uñas pasen de líquido a la consistencia de esmalte-. Son disruptores hormonales y diversos estudios los vinculan a problemas reproductores, neurológicos o cáncer. Cuando las autoridades prohíben unos, nacen nuevos. Presta atención a los Diethyl Phthalate y Dimethyl Phthalate.
- Colorantes: se identifican con C.I acompañado de un número, cuando es 77, significa que son minerales, si van seguidos por 408 o 75 son naturales, el resto, son sintéticos y los más problemáticos: 10006, 10316, 11680,11725, 11920, 12085, 12150, 12370, 12700, 15800, 158850, 15985, 16035, 16230, 16255, 17200, 18050, 18690, 18820, 19140, 20040, 20470, 26100, 27290, 40215, 45220, 50325, 60724, 61565, 61570, 61585, 74260, 77163, 77285, 77288.
- Aceites, vaselinas o parafinas derivados del petróleo poco recomendables como Acrylates, Acrylamides, Carbomer, Cera Microcristallina, Ceresin, Cyclohexasiloxane, Cyclomethicone, Cyclopentasiloxane, Dimethicone, Dimethiconol, Paraffin, Paraffinum Liquidum, Petrolatum, Ozokerite.