Cruelty Free es la etiqueta que indica que los cosméticos que la llevan no han sido testados en animales.
Michelle Thew, directora general de Cruelty Free International, ha pasado por Madrid para explicar su trabajo y para presentar además que los cosméticos de Primark han conseguido esta etiqueta. Muy pronto veremos en los cosméticos de la marca irlandesa el logo Leaping Bunny que certifica que la cosmética de Primark no está testada en animales.
Este conejito impreso en los envases de cualquier cosmético indica que ninguna de las materias con las que está elaborado el cosmético ha sido testado en animales. Según los datos de la Unión Europea, aproximadamente 12 millones de animales al año son utilizados para probar cosméticos, ya sea una barra de labios, una crema o un maquillaje.
La Unión Europea prohibió en 2003 que se testaran cosméticos en animales. La primera fase se implantó en 2009 e hizo ilegal que se testaran ingredientes cosméticos y la segunda, en 2013 y afecta a todos los productos que tuvieran que realizar pruebas de toxicidad. Sin embargo, aún hay 10 años de prórroga, con lo cual hasta 2023 se pueden testar en animales algunos productos.
Hemos avanzado mucho pero no es suficiente porque en todo el mundo se usan 115 millones de animales para probar algún ingrediente o producto que luego usamos nosotras en nuestra cara, cuerpo o cabello. Y realmente no es necesario.
Michelle Thew, directora general de Cruelty Free International, ha concedido unos minutos a Belleza Pura para contarnos qué hacen en esta organización internacional.
Michelle se unió a esta organización en 1999 y ha supervisado la implementación de las estrategias de la organización para crear cambios positivos en los animales en los laboratorios. Ella encabezó durante una década la campaña de la organización para acabar con las pruebas de cosméticos en animales en Europa.
Belleza Pura: ¿Cómo podemos estar seguros de que un cosmético no ha sido testado con animales?
Michelle Thew: “La mayoría de los países, alrededor de un 80%, no tiene ningún tipo de ley para evitar testar los productos cosméticos en animales, así que mi principal cometido es intentar que esto sea global, que abarque el mundo entero y que estos países empiecen a regular el funcionamiento de la industria cosmética. Y por eso es importante una organización como Cruelty Free, porque además de transmitir el mensaje que ya de por sí es importante, se encarga de que haya una serie de pasos y procedimientos que todas las empresas deben seguir para demostrar que no hacen ningún tipo de prueba en animales“.
B. P. ¿Hay muchas marcas que ya no testan sus productos con animales?
M. T.: “Ahora mismo hay unas 100 marcas cosméticas, como The Body Shop o Mark and Spencer, que son ya parte del programa Cruelty Free y ahora se ha unido Primark, una marca potente“.
B. P. : ¿Qué hacen para atraer a las marcas hacia Cruelty Free?
M. T.: “Es una buena noticia poder contestarte a esta pregunta porque al principio yo iba con mi equipo llamando a las puertas de las marcas dando este mensaje y ahora las posiciones se han dado la vuelta y son las marcas las que acuden a Cruelty Free para formar parte de esta asociación. Todo esto nos ocupa mucho tiempo y acarrea mucho cansancio pero aún así es una maravillosa noticia“.
B. P. : Usted lleva trabajando en Cruelty Free 20 años. ¿Qué le ha llevado a estar en esta lucha?
M. T.: “Sí efectivamente, pero no sé porqué. Realmente es mi pasión. Incluso cuando era pequeña yo tenía ya esa conexión con los animales, y estoy comprometida de corazón para que esto termine y cada vez que se consigue un cambio por pequeño que sea es un motor para continuar hacia delante. Los animales no tienen voz y las prácticas con ellos en los laboratorios se llevan en secreto a puerta cerrada, con animales que no se pueden defender. Si nosotros no hablamos por ellos esta situación puede quedarse así eternamente“.
B. P. : Primark es la última empresa que vende cosméticos que ha conseguido este certificado ¿Cómo se consigue el certificado Cruelty Free?
M. T.: “Sí, Primark es la última y ha sido una de las más intensas. Por eso, es una gran noticia que un grupo tan grande, con una gama muy amplia de productos se haya implicado. Para conseguir el certificado, básicamente lo que se hace es un estudio de toda la cadena de producción de cosmética de la compañía, desde los ingredientes hasta las fábricas. Se va haciendo un estudio ingrediente por ingrediente, proceso a proceso, asegurando que cada uno de ellos no está testado en animales y, una vez que puedes garantizarlo, ya pueden poner el sello de Cruelty Free y comprometerse a seguir haciéndolo en el futuro“.
B. P. :¿Qué países están más sensibilizados y cuáles menos ante este problema?
M. T.: “Los que tienen prohibido el uso de animales para para testar los productos son la Unión Europea, India, Nueva Zelanda, Guatemala, Brasil, Corea… Y nuestro siguiente objetivo es Estados Unidos; de hecho ahora vuelo Nueva York para reunirme en las Naciones Unidas para ver si se regula en Estados Unidos. Vamos país por país.”
B. P.: ¿Será fácil llegar a un acuerdo con Estados Unidos estando Trump en el poder?
M. T.: “No, no será fácil. Hay muchos pasos y muchos papeleos para llevar a cabo este proyecto“.
B. P.: ¿Vosotros sois los únicos que os acercáis a estos países para que dejen de testar en animales?
M. T.: “Hay otras organizaciones que también trabajan por esta misma causa, pero lo que nos diferencia es que nosotros somos los únicos que hablamos con los gobiernos Y aparte de transmitir el mensaje ofrecemos una solución a través del programa Leaping Bunny para que se pueda llevar a cabo el proyecto“.
B. P.: ¿Qué medios tiene la industria para elaborar productos seguros para las personas que no estén testados en animales?
M. T.: “También aquí tengo una buena noticia: hay varias herramientas mucho más baratas y más seguras. Se pueden utilizar modelos informáticos o ingredientes que ya existen y que sabes que ya son cruelty free; además, los avances científicos han hecho posible la creación de piel humana artificial con la que sí puedes testar los productos. Así que, con todas estas posibilidades ya no tienes que hacer las pruebas de los cosméticos con animales. Y ya hay muchas empresas que ya no quieren probar sus cosméticos con animales, pero sus países y sus gobiernos les exigen que sigan haciéndolo. Por eso es muy importante la labor de Cruelty Free, porque nosotros hablamos directamente con estos gobiernos y estas instituciones públicas para que apliquen la ley y que las empresas que quieran dejar de testar sus productos con animales pueden hacerlo”.
B. P.: ¿Alguna sugerencia para el comprador?
M. T.: “Que compren productos cruelty free, que compren marcas que saben que no se testan con animales, que se fijen que tienen el sello del conejito, que cuestionen sus marcas de cosmética favoritas si no tienen este certificado. Y en el caso de que descubran que sus marcas utilizan animales para probar sus cosméticos que escriban una carta a Naciones Unidas para denunciarlo. Así sería el consumidor perfecto“.