Paris-Deauville, Paris-Biarritz et Paris-Venise son los tres nuevos perfumes de la maison francesa inspirados en los lugares más queridos para Gabrielle Chanel.

Cerrar los ojos, respirar profundamente y viajar… Chanel continúa homenajeando a su creadora y ahora lo hace con Les Eaux de Chanel, una pequeña colección de tres fragancias que inicia su recorrido en París y lo termina en aquellos lugares que fueron más especiales para Coco. Escapadas transformadas en perfumes.

Les Eaux De Chanel

Imagen: Beatriz Peña

Tres nuevos aromas dispuestos a refrescar la temporada más calurosa. Recuerdos olfativos de Gabrielle Chanel firmados por Olivier Polge en colaboración con el Laboratorio de Creación y Desarrollo de los Perfumes de Chanel. La firma francesa se ha propuesto que disfrutemos de una escapada sin salir de casa, solo a través del más evocador de los sentidos.

En un frasco de líneas puras, sencillas y sensuales, que imita una petaca que se cuela en el bolsillo de la chaqueta, se esconden estas tres fragancias creadas con los ingredientes más nobles de la perfumería, prolongados, suavizados y diluidos. Los cítricos procedentes de Silicia y Calabria toman la voz cantante para construir aromas en los que el frescor todo lo invade.

125 mililitros de perfume que además está equipado con un dosificador especial, cada frasco difunde microgotas de fragancia durante más tiempo que un vaporizador tradicional, para una aplicación más generosa que recuerda a la de las colonias.

Gabrielle Chanel Deauville 2

París-Deauville.

Allí fue donde comenzó todo. Esta ciudad de la costa de Normandía, el destino preferido de los parisinos para pasar el fin de semana, llama la atención de la joven diseñadora Gabrielle Chanel que decide que ese será el lugar perfecto para vender sus primeras creaciones. Así, en 1913, con la ayuda y financiación del hombre de negocios y jugador de polo Boy Capel –que sería su amante-, Gabrielle lanza su primera colección en su boutique. Mientras el cuerpo de las mujeres todavía sigue atrapado en asfixiantes corsés, ella se permite montar a caballo, con el cuello abierto, y dota a sus primeras creaciones de un confort nunca visto antes su primera boutique de moda. De su tienda saldrán sus características rayas marineras, el punto o el acolchado.

Inspirada en los paisajes de esta región francesa, Olivier Polge ha querido recrear un paseo por el campo verde, amargo e intenso. Una composición desenfadada y nómada, con el sello característico y rebelde entre el mar y el campo.

En primer lugar, se siente la energía revitalizante de la cáscara de naranja, el petit grain y la hoja de albahaca. La esencia de rosa y las notas ajazminadas el corazón. Y en el fondo, el carácter rotundo, vintage y chipre del pachulí. Una madera arraigada en el suelo, lista para destilar su implacable energía.

Les Eaux De Chanel 3

Paris-Biarritz.

En 1915, sólo dos años después del lanzamiento de sus primeras prendas en Deauville, Gabrielle Chanel inaugura un nuevo espacio en Biarritz. La ciudad de la costa vasca es el lugar de veraneo de la alta sociedad de la época desde el siglo XIX y visionaria, Coco elige este destino para instalar su boutique, justo al lado del Casino, los grandes hoteles y la playa. Gabrielle lleva a sus empleadas con un confort ultramoderno y pronto atrae la atención hasta de la reina Victoria Eugenia de España. En Biarritz disfrutará de la playa y veladas interminables con amigos.

El mar precisamente inspira la composición más acuática de las tres, como si cada uno de los ingredientes estuviera impregnado de agua, un baño helado al sol. En sus notas de salida pomelo y mandarina. Acompañados por una nota acuosa, los cítricos abren camino a un acorde de muguete. En el fondo de la fórmula, el vetiver se entremezcla con las notas de almizcles blancos para intensificar las sensaciones tónicas.

Coco Chanel Venecia

Paris-Venise.

A Venecia llegó Gabrielle Chanel invitada por Misia y el pintor José María Sert que querían hacerle olvidar a Boy Capel, fallecido trágicamente en un accidente de coche en 1919. En la ciudad de los canales recuperaría Coco las ganas de vivir y la inspiración para refinar su estilo inimitable.

Aquí Polge ha creado la composición más urbana de las tres, un largo viaje a bordo del Orient-Express, que separa la capital francesa de la ciudad italiana. Aires orientales como la faceta más barroca de Chanel. Aunque los cítricos vuelven a tejer el hilo conductor, el neroli permanece en segundo plano. Un acento de frutos rojos susurra al lirio y al geranio de Grasse, ácido y oral. A continuación, la madera de cedro y el acorde ambarino toman la palabra. Se siente como la nota avainillada y los aromas orientales aportan calidez a la piel sin tomar el poder. Venecia, accesible y sutil.

Les Eaux de Chanel. Precio: 112 euros / 125 ml.