Se acerca la temporada de festivales… ¡y tú con esos pelos!
Llevas meses soñando con este momento. Por fin han vuelto las oscuras golondrinas primaverales con sus interminables listas de artistas, carpas y marcas patrocinadoras. Allanadas están las cañadas para una nueva y trepidante temporada de trashumancia hípster a lo largo y ancho de nuestras fronteras, y aunque la música sea ‘lo de más’, no hay que descuidar los lukazos que te plantificarás en aras de salir divina en Instagram pasar el trance mona a la par que cómoda.
Resulta la cuestión moda -confiesa que en febrero ya tenías el guardarropa planificado-, queda la importantísima cuestión capilar. ¡Ficha estas ideas de peinados festivaleros!
Recogido en la coronilla: más cómodo y fácil, imposible. Sobre todo, si tienes rizos, como demuestra esta audaz y esforzada festivalera. Un look todoterreno con el que lo mismo te puedes cascar un Sónar noche que un Festival de Jazz de Montreaux. Importante dejar el flequillo enmarcando el rostro o unos mechones en su defecto.
Juego de Tronos meets Gwen Stefani en este peinado de inspiración romántica que consiste en recoger las capas superiores de la melena en un par de moñitos. Las ondas surferas suelen ser el aderezo perfecto para el resto.
¿Te acuerdas de cómo lo petaron las trenzas de boxeadora el año pasado? Pues bien, este verano no han perdido terreno y siguen a la cabeza de los peinados más favorecedores y ‘tendenciosos’. No es para desmañanadas, eso sí; si te lías mucho con el entramado siempre puedes recurrir a las trenzas clásicas o a la trenza espiga, ese coqueto estilo que tanto vale para una boda como para un lodazal.
Ya en plan creativo, hemos encontrado este ejemplo de ‘trenzas mochas’, un híbrido entre la coleta y la trenza que consigue ese deseable efecto poscoital y desenfadado de llevar mucho recorrido a las espaldas. Para amantes de la imperfección.
Este precioso rosa empolvado tipo Blorange no es exactamente para todos los pelos por aquello de la decoloración, pero si tu melena lo aguanta, puede ser un puntazo en esas primeras filas de los festivales del mundo. Consulta con tu estilista cómo conseguirlo y planifica el timing para que tus raíces negras sean únicamente una referencia musical.