La manteca de cupuaçu posee un poder nutritivo 1,5 veces superior a la manteca de karité.

Hasta ahora, la manteca de karité era lo más nutritivo del mundo para la piel. Eso era hasta ahora, porque se ha comprobado que la manteca de cupuaçu tiene unos efectos nutritivos mucho mayores: es emoliente, nutritiva y absorbe el agua con facilidad. Posee una composición única de ácidos grasos insaturados -palmíticos, esteáricos y oleicos-, además de polifenoles vegetales y esteroles que protege e hidrata la piel y el cabello.

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Photo by Ricardo Solar (Bob) on Foter.com / CC BY-NC-SA

No me extrañaría nada que dentro de poco en nuestras fruterías pudiéramos adquirir cupuaçu o cupuazú, cuyo nombre significa algo así como alimento para los dioses, y se convirtiera en el nuevo súperalimento.

Tampoco sería la primera vez… Este fruto, del que empecé a oír hablar la semana pasada durante la presentación de la nueva línea corporal de Klorane (ya os contaremos más), es una fruta tropical sudamericana de la que se aprovecha todo, como aquí nuestro amado cerdo.

La cáscara del cupuaçu sirve para artesanía; la pulpa (imagen de arriba) para la alimentación y las semillas, para extraer una manteca altamente nutritiva para tu crema corporal y por ende tu piel.

El cupuaçu (Theobroma grandiflorum) es un árbol grande, mide entre 14 y 18 metros de altura y su diámetro es de 5 a 9 metros.

Sus frutos son pesados y tienen un parecido al melón y al coco, la pulpa es cremosa y con un sabor similar al chocolate (de ahí también que se le conozca como “cacao amazónico”). También suele compararse con una mezcla de chocolate y algunas frutas como pera o piña, haciendo referencia a su frescura y original sabor, o al menos eso dicen los que entienden porque, la verdad es que no la he probado. Creo que todavía no se vende por estos lares aunque puede ser por poco tiempo.

Los habitantes del Amazonas lo recolectan porque tiene buen sabor, se le atribuye propiedades medicinales, como por ejemplo, que las semillas mejoran el dolor de tripa y ayuda a mejorar el sistema inmunológico, por lo que parece que es un buen remedio para prevenir y combatir gripes y mejorar la cicatrización de las heridas, posee propiedades antioxidantes, es rico en varias vitaminas tales como el complejo B y la vitamina C, además de fibra, hierro, fósforo y proteína.

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Manteca de cupuaçu. Photo by cupuacu-fruit on Foter.com / CC BY-ND

¿Cómo es este fruto tan exótico?

Dentro de la pulpa se encuentran entre 20 y 30 semillas marrones, ovales, del tamaño de una uva, que antes se descartaban hasta que han descubierto sus propiedades hidratantes y nutritivas y se obtiene mediante el prensado en frío.

Con lo que se han encontrado al trabajar con esta manteca es que refuerza la barrera lipídica gracias al ácido oléico y al linoleico, que previene la deshidratación con los ácidos araquídico y behénico que entran en la composición de la capa hidrolipídica y que dejan una película hidraprotectora en la superficie de la piel para prevenir la pérdida insensible del agua.

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Dado que es súper-emoliente y va fenomenal para las pieles muy secas, algunas marcas, como Klorane o Lush, ya le han echado el ojo y la han incorporado a algunos de sus productos.

Se obtiene trabajando junto a las comunidades amazónicas para que sean éstas las que extraigan las semillas. Al mismo tiempo que se estimula la agricultura local, algunas marcas se suman a proteger la Amazonia de la deforestación. En muchas ocasiones, las propias comunidades de indígenas no son conscientes de cómo está en peligro su hábitat.

Acordaos de esta manteca -manteca de cupuaçu-, que me da la impresión de que va a dar mucho que hablar en el universo body milk.