LE PURE es una firma de cosmética orgánica de lujo basada en los principios de la botánica
De la mano de Ikons Gallery acaba de aterrizar en España LE PURE, una de las pocas gamas de cosmética tan natural que se puede comer. Con 11 productos para cuerpo y rostro que son auténticas obras de arte botánicas, utilizan activos adaptogénicos y bioasimilables para dar soluciones a las cuitas de belleza de todo tipo de pieles. Los productos son multiusos y se basan en aportar la dosis apropiada a las necesidades de cada persona, siendo compatibles incluso con las pieles más sensibles. Sin marketing engañoso y sin abarrotar el cuarto de baño con un exceso de productos.
Sólo se le podría ocurrir a un dúo de mujeres formular productos de alta cosmética orgánica utilizando únicamente ingredientes tan limpios y tan mínimamente procesados que se podrían servir en una cena. Nacida de la mente de la fitocosmetóloga Marie Carrasquedo y la empresaria social Julia Atzesberger, LE PURE selecciona con mimo los ingredientes para crear productos orgánicos que nutran la piel desde dentro.
Su compromiso llega a tal punto que ellos mismos transforman las materias primas mediante procesos físicos para asegurarse de que las sustancias no cambian, en lugar de comprar ingredientes ya procesados a proveedores. E incluyen cero elementos de síntesis. “Hay que evitar los ingredientes sintéticos, pero también los ingredientes de origen natural que han sido modificados mediante procesos químicos. Por ejemplo, las grasas hidrogenadas son subproductos de la materia prima y la piel ya no lo reconoce, por lo tanto no los puede absorber”, nos explica Marie Carrasquedo.
En un mundo en el que para leer las etiquetas casi requiere un máster, LE PURE destaca por su transparencia y su compromiso con las fórmulas limpias. Además de utilizar ingredientes comestibles, llama la atención la ausencia de conservantes agresivos en las cremas, algo bastante peculiar teniendo en cuenta que no es necesario refrigerarlas. “Cada fórmula cosmética tiene su propio método de conservación. Lo más difícil son las cremas o emulsiones. Aquí hemos desarrollado un proceso de fabricación en que cada paso contribuye a la óptima conservación, por ejemplo esterilizamos las arcillas previamente y añadimos […] ácido sórbico, un ingrediente parecido al bicarbonato, para evitar que se desarrollen hongos en las cremas”, incide Carrasquedo.
Bellezas Puras, en un momento en el que parece que todas las marcas se apuntan al carro de la cosmética natural, es importante aprender a leer las etiquetas para que no nos den gato por liebre. Un truco fácil: Marie nos cuenta que cuando modificamos un ingrediente natural de manera sustancial “ya no puede mantener el nombre de la planta en latín, sino recibe un nuevo nombre de laboratorio como Cetearyl Alcohol, Caprylic/capric triglyceride, Stearate, etc”.
LE PURE es, en esencia, una oda a la botánica y los beneficios de la naturaleza. Y es que no todas las marcas de cosmética natural son iguales. Aunque ahora muchas firmas se han apuntado al carro de lo bio, es muy complejo formular texturas innovadoras sin utilizar conservantes agresivos, ingredientes de síntesis, o incluso principios activos naturales con un elevado impacto para la biodiversidad (léase el famoso aceite de palma, que está dejando sin futuro a muchos orangutanes). Por suerte, iniciativas como LE PURE están redefiniendo los estándares en el cuidado biológico de la piel y enseñándonos que es posible consumir productos de belleza sin agredir a nuestro cuerpo o al medio ambiente. Auténtico lujo ecológico para la mujer comprometida del siglo XXI.
Los productos de LE PURE se encuentran a la venta en exclusiva en IKONS GALLERY.