Aptos para todos, en cualquier momento, edad y situación.
Te proponemos ocho ejercicios para mejorar la circulación sanguínea que nos recomienda la Asociación Cuida tus Venas. ¡Arriba esas piernas y ponte en movimiento!
Nos movemos poco y terminamos pagando las consecuencias del sedentarismo en forma de mala irrigación sanguínea en las piernas. El resultado, en el mejor de los casos, pesadez e inflamación. En el peor, arañas vasculares y varices.
¡A aligerar las largas jornadas de oficina!
1. Separación de piernas (10-15 repeticiones).
Tumbada en el suelo -sobre una esterilla o una manta, lo que tengas a mano-, levanta cada pierna alternativamente y vuélvela a bajar al suelo, como si caminaras en el aire.
2. Pedaleo (15-20 giros).
En la misma postura, dobla las piernas y pedalea en el aire con energía.
3. Giros (15-20 repes).
Sin levantarte, levanta cada pierna y gírala dibujando círculos en el sentido de las agujas del reloj. Una vez termines, repite la operación dibujando círculos en el sentido contrario.
4. Flexiones de los dedos de los pies (20 veces).
En la postura que prefieras, y con las piernas estiradas, flexiona y extiende los dedos de los pies.
5. Movimiento de pies (20 veces).
Sentada en una silla, separa y junta las puntas de los pies.
6. Flexiones de los pies (20 veces).
Sentada, alterna la subida de talones y puntas.
7. Andar de puntillas (las veces que quieras).
Andar de puntillas, sin más, es un ejercicio estupendo para estimular el retorno venoso.
8. Sobre los talones (las veces que quieras).
Al contrario que en el ejercicio anterior, mantente de pie sobre los talones y repite varias veces.
Todos estos ejercicios para mejorar la circulación sanguínea deberían durar unos 10 minutos como mucho. Si puedes, acuérdate de hacerlos cada 2 horas de trabajo sentada. ¡Notarás la diferencia!