El cansancio y el estrés pueden parecerse peligrosamente a la depresión

Es esa sensación de estar eternamente agotados, bloqueados por un aluvión de obligaciones (auto) impuestas e inmersos en un ritmo frenético del que es muy difícil escapar.

En el cansancio existe una amplia escala de grises, desde el escalafón ‘razonable y cartesiano’ (‘he hecho un esfuerzo y es normal que esté cansad@’) al ‘extremo al borde de la angustia’ (‘me siento derruid@ sin salir de la cama’). Cuando los síntomas de la persona agotada se hacen crónicos, se corre el riesgo de caer en lo que los expertos denominan como síndrome de burn-out (quemarse, en román paladín). Hay que tener cuidado al discernir, puesto que las manifestaciones de ese agotamiento se parecen mucho a las de una depresión, y lo más probable es que terminen derivando en esa patología.

“Cansados”, del Dr. François Baumann (fundador de la Sociedad de Médicos Terapeutas y profesor en la Universidad de París), aborda la fatiga nuestra de cada día desde el enfoque de la autoayuda. Como en cualquier otro problema, la detección precoz es clave para frenar el avance.

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Entre las señales de alarma se cuentan el insomnio, la falta de apetito, la tristeza sin motivo aparente, el descenso en el ritmo laboral y en la libido, los despistes y la falta de concentración, la ansiedad y el estrés, el desequilibrio entre el tiempo dedicado al trabajo y al ocio, el empobrecimiento en la calidad de la relación con la familia y el miedo a los imprevistos. Situaciones muy tóxicas que pueden minar poderosamente el estado anímico más alicatado.

“Cansados” analiza las estructuras de nuestra alocada sociedad moderna, y localiza los grupos de profesionales más expuestos a altos niveles de estrés y agotamiento psíquico. Estos son los profesionales dedicados al cuidado y la asistencia a los demás (médicos, enfermeras y asistentes sociales), profesores, jueces y personal penitenciario, pilotos y sobrecargos de avión, controladores de tráfico aéreo, periodistas, policías, conductores de transporte público, personal administrativo, vendedores y/o cajeros de supermercado (no digamos nada ahora que abren 24 horas) y deportistas de élite.

Sin embargo, del cansancio también se sale. Como toda obra con vocación de aportar herramientas para el desarrollo personal, en sus páginas explica los errores que conducen a esta situación y cómo adaptar las terapias médicas y psicológicas para paliar este mal. Que no te canse leerlo.

 “Cansados. Cómo luchar contra la fatiga y el agotamiento del día a día”, Dr. François Baumann. (Editorial Arcopress).

Precio: 17,50 euros.