En la edición número 31 de los Premios Goya hubo muchos vestidos en blanco y en negro, apuesta arriesgadas y ganadoras y algún descalabro. En cuestiones de belleza los recogidos y el cabello suelto compartieron protagonismo casi a partes iguales, los labios oscuros más vampy destacaron sobre los demás y un acabado, el mate, confirmó que está de tendencia absoluta.
El recogido es una de las mejores opciones cuando se pretende que todas las miradas apunten al vestido. En cualquier alfombra roja que se precie es uno de los peinados estrella. Casi siempre recurre a él Penélope Cruz, en este caso con el flequillo largo ladeado.
También confiaron en él con flequillo Leticia Dolera o Belén Cuesta –peinada por Green Hair and Beauty-. Otras que sucumbieron a sus encantos y comodidad fueron Clara Lago que lo llevó alto y con una trenza alrededor, como Amaia Salamanca. Ana Belén también recogió todo su cabello hacia atrás con algo de volumen, lo mismo que Nieves Álvarez o Juana Acosta. No acertó Leonor Watling, con un moño de bailarina demasiado pegado al rostro.
La melena suelta es otra de las constantes sobre la alfombra roja. Las que dejaron su pelo al aire optaron por ondas rotas o abiertas – Bárbara Lennie, Natalia de Molina, Manuela Velles, Paula Echevarría, Alexandra Jiménez o Miriam Giovanelli-.
Aura Garrido puso la guinda perfecta a sus labios con el pelo liso peinado hacia atrás.
Michelle Jenner se salió de la constante apostando por un falso bob y Silvia Abascal con un semirecogido tirante con el cabello liso..
Y sólo dos actrices se atrevieron con el pelo corto. Paz Vega que ya lleva unos años abonada a su comodidad, lo mismo que la jovencísima Anna Castillo. Ambas demuestran que es absolutamente sexy y glamouroso. Paz Vega con su pixie peinado con un efecto wet y Anna Castillo con una melena con mucha textura trabajada con productos de Morrocannoil.
En cuanto al maquillaje, arriesgaron y triunfaron las que se atrevieron con los labios más vamp. Dark lips con acabado mate fue la apuesta de Bárbara Lennie y Amaia Salamanca.
También en mate aunque bajando unos tonos hacia el rojo Aura Garrido, Juana Acosta, Manuela Velles –con ojos en el mismo tono de su vestido-, Nieves Álvarez o Paz Vega. Paula Echevarría descendió algo más en la escala cromática y apostó por el naranja.
Los ojos más o menos intensos y ahumados sobre un maquillaje natural o en tonos tierra se apoderaron del resto de actrices. Precioso, por ejemplo, fue el look de Miriam Giovanelli firmado por Chanel.