El fondo de armario aromático de Yves Saint Laurent abre su puerta a tres nuevas fragancias inspiradas en tres materiales de alta costura. Cuir, Vinyle y Velours, cuero, terciopelo y vinilo, la elegancia más nocturna se convierte en perfumes unisex en Le Vestiaire des Parfums Collection de Nuit. Vestirse de aromas, un lujo que sólo la alta perfumería es capaz de hacer realidad.

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Le Vestiaire des Parfums nació ahora justo un año para interpretar los cinco piezas emblemáticas del armario de Yves Saint Laurent: Tuxedo (esmoquin), Caban (chaquetón), Trench (gabardina), Caftan y Saharienne (sahariana). Ahora nacen tres nuevos miembros, esta vez nocturnos y que convierten en perfume tres materiales icónicos de la alta costura: Cuir, Velours y Vinyle.

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Cuero, terciopelo y vinilo, inspiradoras materias que confeccionan las piezas maestras del vestuario de noche que nunca pasa de moda. Masculinos y femeninos, tres aromas unisex y salvajes que forman una pequeña gran familia dentro del vestidor de YSL.

Cuir es la tentación sin complejos y absolutamente provocativa con alma rockera. Yves Saint Laurent sentía una gran pasión por el cuero y lo utilizó desde sus inicios, combinando su brillo con la exclusiva suavidad de las pieles. Además, gracias al cuero pudo darle una dosis extra de seducción a sus diseños de trench largos, utilizados por hombres y mujeres sin distinción, y cubrir las piernas femeninas que los años sesenta permitirían mostrar al fin. El cuero se convirtió así en el cómplice de los juegos ambiguos entre lo masculino y lo femenino, entre lo lujoso y lo popular, entre lo elegante y lo subversivo.

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Compuesto por el perfumista Ilias Érmendis, en Cuirs las rebeldes notas de ron liberan a la fragancia de todas sus ataduras, el tabaco la envuelve con un matiz de ambigua lascivia y las cálidas notas de azafrán potencian el corte del cuero. La intensidad picante del jengibre y del osmanthus se combinan delicadamente con el acorde de té negro y, de este modo, la madera de oud cae con toda su intensidad animal. La madera de gaiac realza el carácter más tenebroso.

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Velours es el poder de un erotismo rebosante de estilo. El terciopelo es un tejido, antiguo y precioso, que se asocia al lujo y esplendor y que ha estado siempre presente en los diseños de Yves Saint Laurent. Pero lejos de ceñirlo al uso más clásico, el diseñador lo empleará para aportar un toque canalla a la elegancia parisina y para convertirlo en el material ideal para las prendas de noche.

Carlos Benahïm ha sido el perfumista llamado a convertir un tejido icónico en perfume. En Velours las oscuras volutas del té negro, la esencia de pimienta negra y la pimienta rosa conforman sus notas de salida.  En el corazón los acordes de flores blancas obtenidos de los pétalos de jazmín, el preciado iris y la esencia de olíbano realzan cada una de las notas de su esencia vintage. Como notas de fondo la vainilla, el acorde de maderas ambarinas y almizcles avivan la voluptuosidad y aportan una suavidad exuberante.

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Vinyle es una sensación brillante cuyo poder se abre a diversas interpretaciones. Este material sintético se convirtió, a partir de los años sesenta, en símbolo de la modernidad, la impertinencia y la subversión. Pero además es un material contradictorio, ya que, si se barniza, la brillante superficie le da un aspecto mojado, aun cuando el vinilo es un material completamente impermeable.

Juliette Karagueuzoglou ha creado este perfume combinando el brillo superficial de la vibrante siempreviva con la enigmática impertinencia de la mirra. La pimienta rosa aporta un matiz nervioso y frío sobre el que flota el toque de bergamota, burbujeante e intrigante. El destello del anís anima la fragancia con su enigmática presencia, dándole un efecto transgresor que se transforma en voluptuosobajo el impulso animal de la vainilla y el jugoso contacto con los bálsamos de styrax y opopónax.

Precio: 240 euros / 125 ml.