SMClinic es un centro de medicina y estética que persigue una puesta en forma de belleza y salud para verse y sentirse mejor de manera integral. Su oferta se basa en tratamientos médicos y estéticos enfocados al rejuvenecimiento facial y el bienestar cuerpo-mente, regados con cosmética de lujo bien aplicada. Trabajan con Maria Galland y Casmara, marcas de cosmética con muy buenos protocolos de cabina. Yo elegí uno fantástico de Casmara, firma de estética profesional a la que le había perdido la pista desde hace tiempo y que ahora resurge renovada. Como me gusta ver crecer y evolucionar a las marcas de cosmética española y el buen nivel profesional de la estética española.
Así da gusto probar tratamientos faciales, siempre en buenas manos.
El plan de juventud de SMClinic incluye programas antiaging médico estéticos y lo último en aparatología corporal y facial. Entre toda su maquinaria para borrar los signos del envejecimiento, afinar el cuerpo y suavizar la mente, cuentan con radiofrecuencia, dermoplastia, plataformas vibratorias y una sauna muy especial: Cryosense, una cabina con aspecto espacial que produce un criocontraste térmico de +80 a -196 º C que aumenta nuestras endorfinas con efectos antiinflamatorios y análgesicos que utilizan los deportistas de élite para recuperarse de sus lesiones deportivas.
Estuve muy tentada de probar esta interesante sauna, pero al final no me quise arriesgar a que se me pusiera la piel como un tomate por mi dermografismo . Pero considero que es un buen sistema de rehabilitación del dolor muscular y sólo mediante frío, sin tener que tomar demasiados análgesicos. Igual que las vibraciones de las andulaciones para paliar dolores musculares.
Después de un ritual de limpieza, hidratación y mascarilla en el que hubo aparatologia, efervescencia de texturas cosméticas y abundantes masajes con los que iba perdiendo intermitentemente la consciencia. Al despertar y observar mi cara frente al espejo, sí estaba despejada y muy consciente de que la imagen que me devolvía el espejo era la de una piel limpia y más tersa. Gracias, por una sesión de belleza facial que fue como un revitalizante vaso de agua en el desierto. ¡Qué bien sienta una sesión de hidratación y firmeza de vez en cuando!
Me gusto mucho el frescor de la mascarilla profesional personalizada de Casmara, una textura que permite superponer el uso de la ionización y electroporación para transmitir diferentes corrientes y estimular todavía más la reafirmación de la piel.
Al finalizar la sesión me regalaron la mascarilla, que era como una careta flexible en tono rosa y con estampado de ramitas de eneldo, con la promesa de conservarla en la nevera 2 días, los cuales disfruté de su frescor nutritivo en el relax de mi hogar.
Tratamiento facial de la línea Longevity de Casmara. Precio: 60 euros
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