La revolución digital también llega a la Odontología. En España se colocan unos 800.000 implantes al año. Gracias a la Cirugía Guiada por Ordenador, podemos reconstruir virtualmente la boca del paciente en tres dimensiones. “Primero se planifica minuciosamente cómo colocaremos la prótesis y el implante que buscábamos” explican desde la Clínica Vilaboa, pionera en esta técnica..
“Así se visualiza el final ideal que antes sólo imaginábamos y conocemos el resultado antes de la intervención. Es como si, en lugar del bisturí, utilizáramos un microsocopio digital” nos aclaran. El Computer Assisted Design (CAD) nos permite ver cómo quedará el implante y también la corona o el puente definitivos.
“Las impresoras 3D también han encontrado su utilidad en la Odontología. En lugar de la fabricación manual de las carillas de porcelana, fundas, puentes, hoy en día se consiguen mediante el diseño virtual; la impresión de estas prótesis consigue una exactitud y una repetibilidad de una calidad muy superiores a las técnicas anteriores”, dice el doctor José Manuel Reuss, especialista en implantes, Master por la Universidad de California (UCLA) en Implantología, que trabaja en la Clínica Vilaboa.
Un robot-fresadora fabrica con precisión milimétrica piezas dentales de un ajuste perfecto.
El primer paso es hacer un estudio radiográfico y un escáner oral para obtener una imagen en tres dimensiones del maxilar del paciente. Con los datos y conclusiones del ordenador, un programa específico transfiere y transporta los datos. Así podemos simular la operación y reconstruir la boca del paciente en tres dimensiones.
Precio: entre 600 y 1000 euros por implante.
Gracias a la cirugía guiada en implantes hemos entrado virtualmente en el maxilar del paciente y hemos hecho todo tipo de pruebas sin ninguna incisión, ya que trabajamos en el campo de su anatomía virtual. La Cirugía Guiada nos permite ser menos invasivos, evitar grandes incisiones con la misma tasa de éxito que en cirugías más agresivas. “Después, en las fases de laboratorio utilizamos un robot que fabricará con una precisión más que milimétrica coronas de ajuste perfecto con mucha mayor resistencia y una estética hasta hace poco impensables”, añade el doctor Reuss.
Antes y después de la colocación de un implante con Cirugía Guiada.
Las ventajas frente a las técnicas anteriores son enormes: Rapidez. Al saber exactamente dónde colocaremos el implante disminuye considerablemente la duración de la intervención, sobre todo si colocamos varios. Los daños a estructuras se minimizan y en una hora puede colocarse más de un implante. Precisión: Al analizar previamente en el ordenador la mejor posición, cantidad y calidad de hueso, conseguimos una mayor precisión, es decir, mejores resultados estéticos y funcionales. Comodidad: Ya que se reducen cortes, suturas y molestias en la cavidad oral. Al poder prefabricar las prótesis antes de la cirugía se reduce la inflamación y la medicación respecto a las intervenciones convencionales. El porcentaje de éxito alcanza el 97% diez años después de la intervención.
Pero no se trata sólo de sustituir un diente por otro. Además de eficaz, un implante debe respetar siempre la ‘arquitectura gingival’, es decir, que la sonrisa esté en armonía con la forma del rostro y los labios. El resultado perfecto es cuando ni el ojo más experto nota cúal de nuestros dientes es el del implante. El éxito, como siempre, es la naturalidad, aunque sea artificial.
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Tfno: 91 5765429.
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