Regalar un perfume por San Valentín no es el colmo de la originalidad. Pero, ¿y si el regalo fueras tú? La firma de lencería canalla Agent Provocateur propone perfumarse en esta línea. El lema “Make love not dinner” sirve como declaración de intenciones para su nueva fragancia, Fatale. Nada de encerrarse en la cocina durante horas para preparar un calórico menú presentado en la vajilla buena. La firma creada por Joe Corré, heredero sanguíneo del linaje punk de Vivienne Westwood y Malcolm McLaren (quien fuera manager de los Sex Pistols), apuesta por una celebración del amor y del sexo –que a veces se confunden- algo más carnal. “¿No eres tú mucho mejor que la cena?”, parece que pregunten, como sopesando el peso específico de nuestros incitantes muslos y los de un ave cualquiera. La respuesta está clara.
La hermanísima Mónica Cruz –que es igual que Pé, pero en marrón- encarna este espíritu de mujer que se objetifica con gusto, en aras de la entrega y por supuesto, de la captura.
Ataviada con un provocativo diseño de la firma, se descuelga de una cadena con la que aspira a enredar a sus amantes en lazos de irresistible deseo. El misterio de la seducción, resuelto en algunas notas olfativas. O dicho de otro modo, la vocación de casi cada perfume comercial que se lanza al mercado, pero con una impronta declaradamente procaz, sin escondite.
Fatale es tan fatale como las femmes en quienes se inspira: las de la gloriosa década hollywoodiense de los 40.
Una fragancia voluptuosa, sexy, floral y oriental, disponible en set que incluye perfume de 50ml y loción corporal de 150ml. Todo a la venta desde ya mismo en El Corte Inglés y Bodybell.
Precio: 65 euros.
angeles dice:
Lolette 
Rmaria Camacho 
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